Carlos Burgos, padre de una menor estudiante del colegio Assad Bucaram, en Guayaquil, denunció públicamente que, dentro de las instalaciones del plantel en 2022, su hija habría sido secuestrada, golpeada y abusada. Según su relato, presentado en el noticiero RSN América Dignidad, el 14 de diciembre de ese año interpuso una denuncia formal por los delitos de secuestro y violación.
Burgos aseguró que su hija identificó a un hombre adulto, de entre 30 y 35 años, como el presunto autor del ataque. Detalló que la menor habría sido llevada a un cuarto subterráneo descrito como una “caleta”, sin ventanas ni ventilación, donde se habrían cometido los abusos. Además, señaló que la agresión habría sido perpetrada con complicidad de personal de guardianía del colegio.
Según las declaraciones, la investigación del padre apunta a la existencia de una supuesta red de trata de personas que operaría desde el colegio. La organización, afirmó, estaría vinculada con la explotación sexual de menores y la participación de docentes de química, matemáticas y educación física.
Respuesta del Ministerio de Educación
Ante las denuncias, el Ministerio de Educación informó que se activaron los protocolos de investigación correspondientes. Este jueves, a las 14:00, se llevará a cabo una reunión interinstitucional en la Subsecretaría de Educación de la Zona 8 para analizar la situación y coordinar acciones.
En el encuentro participarán autoridades del Ministerio de Educación, el Ministerio de la Mujer, la Policía Nacional (incluyendo la Dinapen) y la Junta Cantonal de Protección de Derechos. Según el Ministerio, el objetivo es garantizar la seguridad de los estudiantes, investigar los hechos y tomar medidas para prevenir situaciones similares.
Acusaciones y seguimiento judicial
Burgos afirmó que el 23 de febrero de 2023, su hija, acompañada por agentes de la Dinapen y peritos policiales, identificó a los presuntos agresores y las estructuras subterráneas donde se habrían cometido los delitos. Según sus declaraciones, estas investigaciones señalarían la participación de al menos 15 víctimas y una red de delincuencia organizada que operaría en el sector Cristo del Consuelo.
El padre también denunció que la Fiscalía no habría dado seguimiento oportuno al caso, a pesar de que se presentaron escritos en febrero y marzo de 2023. Las autoridades aún no han confirmado detalles de las denuncias, pero aseguran que se continuará investigando para esclarecer los hechos.
La comunidad educativa y las instituciones involucradas se encuentran a la espera de resultados sobre este caso que ha generado gran conmoción.
Aquí la entrevista: