Este lunes 07 de febrero los estudiantes del régimen Sierra-Amazonía regresaron a clases presenciales. La incertidumbre aún se mantiene en padres de familia sobre las medidas para frenar posibles contagios de coronavirus. No obstante, existe otro problema silencioso que podría ser más dañino que el mismo covid-19: el bienestar mental.
Hace pocos meses la Unicef indicó que se necesitarían entre siete y ocho años para recuperar lo perdido y volver a niveles de progreso respecto a educación y bienestar mental en el Ecuador.
Bajo estos parámetros, Metro Ecuador conversó con el psicólogo familiar y educativo, graduado de la Universidad de Columbia, Napoleón Vásquez. El especialista con más de 40 años de experiencia indicó que existen graves problemas, en aprendizaje y salud mental, producto de este ir y venir de clases virtuales y presenciales a causa de la pandemia del coronavirus.
Daños psicológicos a niños y adolescentes por vaivén en clases en casa y presenciales
“El primer factor importante, inclusivo muchos niños a través de sus padres están pidiendo ayuda, es el tema de la inestabilidad. El segundo, respecto a las clases virtuales, indican que los estudiantes que están en esta modalidad no son ellos los que están aprendiendo”, comentó.
“Hemos podido comprobar que todo lo que han estado ‘aprendiendo’ en este tiempo no es real”, enfatizó Vásquez.
Para el doctor, cuando se estabilice las clase presenciales se van a ver las consecuencias. Por otro lado, el campo conductual es lamentable. “Los niños han perdido sociabilidad, no se puede retroceder la edad para devolverles el hecho de jugar, enojarse y compartir.”
“La sociabilidad infantil tiene que ver mucho con el desarrollo de cada uno de ellos”. Para el psicólogo el campo triangular básico (atención, memoria y concentración) está prácticamente disminuido.
“El ir y venir de clases virtuales a presencial está afectando el conocimiento que deben adquirir los estudiantes. Los niños tienen que volver aprender lo perdido durante la pandemia.”
“Es importante que los padres reconozcan que en verdad sus hijos no están aprendiendo la gran cosa. En su desesperación de no repetir el año, no tienen en la conciencia que lo que aprendido el niño habrá que volverle a enseñarle”.
Problemas para futuro
“Las clases virtuales no han tenido un efecto positivo, no ha tenido los lineamientos pedagógicos suficientes para captarle a los estudiantes. Pasa en todas las áreas de educación. Van a tener problemas serios al llegar a la universidad”.
“Los campos psicológico -conductual y psico-pedagógico van a verse debilitados en los estudiantes”, ratificó.
¿Habrá más indecisión en escoger una carrera universitaria?
“¡Sí!” Para él debe programarse módulos de ayuda, los cuales permitirán salvar la situación de indecisión de los estudiantes a futuro.
“Una vez que haya estabilidad entonces podremos pensar en la posibilidad, especialmente del área gubernamental, de organizar programas de nivelación (grado por grado)”.
¿Crecerá el bullying?
“Sí, va haber un problema serio. En este ir y venir de lo virtual y presencial hemos tenido casos que no se ha cumplido esa ilusión de ver a sus compañeros y jugar con ellos (por temas de bio-seguridad)”.
“Va a ser importantísimo que le den prioridad al ámbito psicológico de niños, adolescentes y adultos”.
“En algún momento van a tener que dar prioridad al área psicológica y psico-pedagógica. Esto va ayudar la mejor nivelación en cuestiones académicas. El niño está con un campo conductual óptimo va a poder recuperar su personalidad, lo cual también están perdiendo”, enfatizó.
“El problema social general está perdido. Tiene que reconstruirse el área pedagógica de acuerdo a las materias que curse en el año lectivo. Nos queda todavía lejano esperar la normalidad, tenemos que evitar que se distancien más los conocimientos y desarrollo de los niños”, señaló.
Comunicación de padres a hijos
“Se sobreentiende que debe darse el ejemplo como adulto. Hay cinco cosas que los niños y adolescentes piden, comúnmente, a sus padres: que sean maestros, sean confidentes, consejeros, compañeros y amigos”.
Recordó que estamos tratando con una nueva generación, donde los padres no están preparados para este sistema diferente.
El especialista indicó que actualmente niños y adolescentes traen otro fondo de desarrollo. Apuntó que la violencia física, amenazas agrava la situación y los problemas se ven al futuro inmediato y de esta manera lo replican con sus amigos, familiares o cercanos.