Esta tarde, la Fiscalía General del Estado inició un nuevo proceso penal en contra de la exministra María de los Ángeles Duarte, por el presunto delito de incumplimiento de decisión legítima de autoridad competente, tras haber incumplido las medidas cautelares que se le dictaron en el proceso del caso «Sobornos 2012-2016», en el que fue sentenciada a ocho años de privación de libertad por el delito de cohecho.
Al finalizar la diligencia, el juez de Garantías Penales, Máximo Ortega, acogió el pedido de Fiscalía y dictó orden de prisión preventiva en su contra.
María de los Ángeles Duarte dejó de presentarse en la Corte Provincial del Guayas como lo dispuso la Corte Nacional de Justicia y actualmente se encuentra en la Embajada de Argentina, desde mediados de agosto.
Entre los principales elementos de convicción presentados en la audiencia de formulación de cargos constan los informes emitidos por el Servicio Nacional de Atención Integral de Personas Adultas Privadas de la Libertad y a Adolescentes Infractores (SNAI), uno de ellos puso en conocimiento la noticia del delito.
Otro documento indica que el dispositivo electrónico que llevaba la procesada emitió varias alertas el pasado 13 de agosto, advirtiendo que se quitó la pulsera y María de los Ángeles Duarte dejó de contestar las llamadas del SNAI. Además, hay un reporte de que su última ubicación fue la Embajada de Argentina.
Fiscalía también presentó las versiones de funcionarios del SNAI y de los agentes policiales que hicieron la respectiva verificación el día que el grillete dio las alertas.
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