En Quito, solo en la segunda quincena de marzo se perdieron alrededor de mil millones de dólares. «Calculamos que la pandemia por COVID-19 le costará a la capital más de cinco mil millones, señaló Patricio Alarcón, presidente de la Cámara de Comercio de Quito.
Además, 1.500 a 2.000 empleos se pierden diariamente, según cálculos que se realizan en base a desafiliaciones del Seguro Social. El empleo formal ha sido el más afectado en empresas que se mantienen abiertas y están quebrando negocios, afirmó.
Nosotros (la Cámara de Comercio de Quito) diseñamos protocolos basados en otros que se implementan en el mundo, pero la responsabilidad del empresario es hacer cumplir los mismos en nuestras empresas; el Municipio debe cumplir con su rol de control; mientras el Gobierno desde el área de salud debería asegurarse que se cumplan todos los protocolos en las clínicas y hospitales para evitar la propagación, además de los lineamientos del COE Nacional, indicó.
PRODUCTIVIDAD
El sector formal puede prevenir mucho y cuidar de que se cumplan los protocolos, eso beneficia no solo a las empresas, sino al Estado, que podrá recaudar impuestos y volver a la normalidad. No así el sector informal.
Al final del día, todos los sectores productivos se unieron para mostrar su desacuerdo con la parte impositiva del proyecto de Ley. Sin embargo, tras haber eliminado de la Ley, después se decide cobrar anticipos de impuestos.
Ecuador está pasando la peor crisis en materia económica y vamos a ser testigo de eso en los próximos meses, porque las empresas no han obtenido ingresos en los últimos 70 días o han disminuido, la reactivación será muy lenta en comparación a 2019 o el primer trimestre del 2020, señaló.
El Gobierno dice que si no tuviste problemas durante la emergencia sanitaria, te cobrarán sobre la utilidad. Explica que lo que no están considerando es que el problema de la gran mayoría de empresas es de liquidez. Hace menos de un año, en diciembre de 2019, pasaron una Ley donde subieron algunos impuestos al sector prodcutivo: dividendos de las empresas extranjeras, nos sujetaron a un impuesto a la Renta que mucha gente aún ni lo puede pagar, bajaron las deducciones para la gente que gana 100 mil dólares o más, lo cual representa una recaudación de 600 millones de dólares.
El Estado dice que va a prestar 1.150 millones de dólares, que a la final nos costará a nosotros mismos. Entonces, ¿cuál es el incentivo del Estado? No existe, indicó.
El sector empresarial debería recibir incentivos, ayudas, sin trabas, para que pueda mantener su operación. Lo que no puedes incentivar en estos momentos, es que muchas empresas que generaron utilidad el año pasado o que siguen operando durante esta emergencia, recurran a los préstamos para poder pagar la nueva tasa del Estado. Eso no está bien. Por más que le haya ido bien a la empresa, el problema es la competitividad, una tarea pendiente por parte del Estado, y nos siguen poniendo trabas.
CONTRIBUCIÓN DE SALARIOS
Alarcón también mencionar la situación del ciudadano en general. «Nos dicen que el que más gana debe contribuir, pero no entienden la realidad. Una persona que gana USD 5 mil, con el aporte al IESS y la retención del Impuesto a la Renta, termina ganando USD 3.800. Entonces si debemos cuestionarnos si están afectando realmente a los que más tienen, o también a la clase media», dijo.
Según un estudio realizado por la Cámara de Comercio de Quito, el 77% de la clase media tiene menos ingresos y está complicada en estos momentos.
Más allá de eso, si uno se ha esforzado toda la vida por ganar cinco, seis, u ocho mil dólares, para mejorar su calidad de vida, debe seguir pagando sus deudas adquiridas. También debe tomarse en cuenta que la gente no dispone de ahorros, y con las últimas medidas le quitan liquidez. Además, el dinero que pretende recaudar el Estado de los salarios, debería ir a la calle para mover la economía.
Este Gobierno ha hablado de acuerdos, pero eso no ha quedado en nada. Ahora toman decisiones a través de decreto y de carácter confiscatorio, porque un impuesto anticipado, que no sabe en base a qué calculo, lo cual está muy mal. Frente a esos temas debemos oponernos rotundamente a ese accionar del Gobierno.
AHORRO POR PARTE DEL ESTADO
«El problema está en el modelo de gasto público que no es sostenible», indicó Alarcón, quien además detalló medidas que se pueden tomar para ajustar las finanzas públicas a la realidad del país.
- Focalización del subsidio.
- Renegociar la deuda con expertos.
- Reestructura del Estado, hay muchas instancias que pierden dinero, y otras que aún operan sin funciones productivas.
- Reformas laborales
«Hay que llegar a consensos reales, y ojalá recapaciten en el Gobierno en lo que resta de tiempo para hacer reformas estructurales en el país».