La Justicia sudafricana condenó a diez años de prisión a la mujer que en 1997 robó a un bebé de una maternidad de Ciudad del Cabo y que fue hallada culpable de secuestro y fraude el pasado mes de marzo, informaron hoy- 15 de agosto- medios locales.
El juez del Tribunal Superior de Ciudad del Cabo, John Hlophe, tomó la decisión tras recordar que la mujer, de 52 años, no ha mostrado arrepentimiento alguno por el rapto de Zephany Nurse cuando ésta tenía solo tres días.
La mujer -cuyo nombre no ha trascendido para proteger la identidad de Zephany Nurse, como se llamaba el bebé antes de que empezara a vivir con la condenada- fue detenida en febrero de 2015, después de que los padres biológicos encontraran por casualidad a su hija.
El descubrimiento se produjo gracias a la hermana biológica de Zephany, que advirtió a sus padres de lo mucho que se parecía a ella una chica cuatro años mayor que acababa de llegar a su instituto.
Esperanzados ante la posibilidad de que fuera su hija desaparecida, los Nurse invitaron a la adolescente a su casa y, tras constatar la enorme semblanza, avisaron a la Policía.
Una prueba de ADN acabaría confirmando que se trataba del bebé que les fue robado.
Tras el arresto de su madre adoptiva, Zephany -como se sigue conociendo a la joven en Sudáfrica- fue puesta en custodia de las autoridades, pero decidió volver a casa con el hombre que creía que era su padre.
Después de que se conociera la condena en marzo, la joven Zephany pidió públicamente respeto para la mujer que la ha criado a pesar de haber quedado probado que la había secuestrado.
Según la confusa versión de la condenada, desechada por el juez, la criatura le fue entregada en una estación de tren por una mujer llamada Silvia, que le había proporcionado ese mismo año un tratamiento de fertilidad después de que hubiera sufrido un aborto