La isla Santa Cruz, del archipiélago ecuatoriano de Galápagos, cuenta con nuevos bosques sustentables, que impiden la proliferación de flora introducida y que son el hábitat de especies protegidas, informó hoy la Dirección del Parque Nacional Galápagos (DPNG).
Explicó que la primera fase de la implementación de bosques sustentables se sembró en un terreno de cinco hectáreas, en el área del vivero forestal de la DPNG.
«Árboles de scalesia, matazarno y guayabillo forman el primer bosque sustentable creado en el área del vivero forestal de la Dirección del Parque Nacional Galápagos, en la parte alta de la isla Santa Cruz», apuntó en un comunicado.
El objetivo del programa, que inició hace ocho años, es restaurar ecosistemas de alto valor ecológico, agregó al anotar que así empezó la preparación de las primeras cinco hectáreas, la obtención de 5.000 plantas y la reforestación.
«Con el paso del tiempo, los primeros árboles plantados cumplieron su función de proveedores de semillas y dieron paso a la regeneración natural del bosque, la cual es evidente en la actualidad», añadió.
El guardaparque Rafael Chango recuerda que la scalesia se estableció bien gracias a su rápido crecimiento; luego continuó con la reforestación de otras especies más lentas, para simular un bosque heterogéneo que hoy cuenta con árboles de tres metros de altura.
La restauración continuó con la preparación de otras 45 hectáreas en el mismo sitio, que ya cuentan con árboles reforestados gracias al apoyo de estudiantes, comunidad, deportistas nacionales e internacionales y turistas.
Detalló que la producción del vivero forestal de la Dirección del Parque Nacional Galápagos, en Santa Cruz, fue de 22.609 plantas en el 2017.
La Scalesia pedunculata es la estrella del vivero con 11.254 unidades utilizadas para la reforestación en 2017, por su histórica presencia en la región, anotó.
Jorge Carrión, director del Parque Nacional Galápagos, mencionó que «en el corto plazo cubrirá la zona húmeda con un bosque natural que evitará la proliferación de especies introducidas y permitirá recuperar el hábitat de especies vulnerables».
Otro beneficio del vivero es que ayuda a cubrir la demanda de particulares e instituciones públicas y privadas para creación de jardines nativos y cercas vivas en sus predios, indicó.
El archipiélago de Galápagos está situado a unos mil kilómetros de las costas continentales ecuatorianas y fue declarado en 1978 como Patrimonio Natural de la Humanidad por la Unesco. EFE