En un trágico accidente doméstico ocurrido en Llavallol, en el partido bonaerense de Lomas de Zamora, un niño de apenas 8 años perdió la vida tras recibir un disparo en el cuello en una fallida maniobra que hizo su tío policía.
La tragedia se desencadenó alrededor de la 1 de la madrugada, cuando un efectivo de 21 años perteneciente a la Dirección Unidad Táctica de Operaciones Inmediatas (UTOI) de la Policía de la Provincia de Buenos Aires, se encontraba de franco y limpiaba su arma reglamentaria, una pistola Bersa calibre 9 milímetros.
Tras el incidente, el chico fue rápidamente trasladado al hospital de Llavallol en busca de asistencia médica. No obstante, las lesiones sufridas resultaron mortales.
A su vez, se tomaron medidas disciplinarias y legales contra el policía involucrado y Asuntos Internos del Ministerio de Seguridad Bonaerense lo desafectó de sus funciones inmediatamente.
El caso está siendo investigado por la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) 8 del Departamento Judicial Lomas de Zamora, bajo el nombre de “homicidio culposo”.
La fiscalía a cargo ordenó una serie de acciones para esclarecer los hechos, incluyendo la autopsia del cuerpo del niño, peritajes del arma implicada y un dermotest para detectar residuos de pólvora tanto en el efectivo policial como en la víctima.