Infantes de 11 y 13 años fueron los artífices del asesinato del sargento segundo de la Policía, Freddi David Bonilla, la noche de este 13 de febrero. Fue una cámara de seguridad la que pudo captar el instante donde los menores de edad disparan armas de fuego provocando que el uniformado se desplome sobre el pavimento.
El asesinato se dio después que Bonilla fue sorprendido por los menores, estos tenían el objetivo de robarle la motocicleta, el arma de dotación y sus pertenencias. “Quiso entrar a una casa, pero no lo dejaron ingresar y los delincuentes lo matan en la calle”, dijo el Teniente Coronel, Diego Velasteguí, comandante de la Subzona de Esmeraldas.
Como quedó registrado en la cámara de videovigilancia, los asesinos se acercaron al cuerpo inerte del agente para sustraerle sus pertenencias; usaron la fachada de una vivienda para protegerse del intercambio de disparos.
El suceso se dio en el sector conocido como “50 casas”. Bonilla era agente que ejercía funciones en la Dirección Nacional de Policía Especializada para Niños, Niñas y Adolescentes (Dinapen).
La Policía envía condolencias
Posterior al hecho violento suscitado en la provincia verde, la cuenta oficial de la institución en Twitter se pronunció y se declararon en luto por el asesinato del gendarme.
“Estamos de luto, por la partida de nuestro compañero, héroe con uniforme que mantenía su espíritu de servir y proteger, brindando la seguridad anhelada por todos los ciudadanos”, decía el pronunciamiento.