Han pasado varios meses desde que la periodista Estéfani Espín recibió un diagnóstico tajante, incomprendido, uno que no la afectaba de manera física directamente, pero que fue incluso más allá de eso y la devastó tanto a nivel espiritual como anímico. Una noticia que trajo consigo muchas preguntas que hasta el día de hoy, todavía no tienen una respuesta.
La reconocida presentadora tuvo que hacer frente a lo que toda madre teme, el conocimiento de que su hija Emilia, sufría de una particular y poco común enfermedad, el síndrome de Rett. Fue en una entrevista en el segmento digital ‘Una noche con Juan Carlos Aizprúa’, que Estéfani narró como fue el enterarse, ahora, tras un tiempo desde aquel descubrimiento, la comunicadora ha vuelto abrir su corazón para contar como ha sido todo el proceso desde ese momento.
“Yo sé lo que yo quiero, pero estoy consciente que el milagro puede ser lo que Dios quiera, que signifique la felicidad de mi hija, que signifique el final de esta historia como Dios cree que tiene que estar escrita”, dijo la periodista, quien confiesa que ya ha aceptado y aprendido a abrazar el hecho de que Emilia sigue compartiendo momentos con ella, regalándole recuerdos.
“Yo veo a Emilia y lo primero que pienso ‘es un milagro que hayas venido’ porque además en los tiempos que cada uno tiene tú piensas que tienes que vivir con tu hijo 60 años de vida”, agregó, al tiempo que aclaró que ya no ve el padecimiento de su hija desde lo que espera, sino de lo que sabe que puede suceder.
“Tengo miedo a que se acabe pero lo acepté”, unas palabras que sin duda alguna recogen un poderoso mensaje, Estéfani se ha dedicado en cuerpo y alma a vivir cada día de Emilia al máximo, a retratar cada una de sus sonrisas y sus avances, admite que poner al servicio su talento, es lo que la ha salvado.
“La bendición de la vida es aprender a dar y poner tus talentos al servicio de otros. Esa es mi única terapia, es mi única forma de sobrevivir y llevar esto”.