Científicos de la Universidad de Chongqing, en China, han desarrollado un nuevo tipo de tejido que puede generar electricidad capaz de alimentar pequeños aparatos a partir del movimiento y de la luz solar, informa la prensa oficial china.
La composición y fabricación del tejido permiten que un trozo de cinco centímetros de largo y cuatro de ancho pueda generar energía suficiente para cargar un teléfono móvil o mantener en funcionamiento un reloj de muñeca con un movimiento constante y en momentos de suficiente luz.
Cargar el teléfono moviéndose
Este tejido está hecho de fibras de poliéster combinadas con una capa de metal y semiconductores para captar y almacenar la energía y con células solares y generadores nanométricos incrustados y es muy fino, con un grosor de apenas 0,32 milímetros.
La capacidad generadora de esta tela se debe a un proceso llamado «efecto triboeléctrico» por el que ciertos materiales adquieren carga eléctrica cuando entran en contacto con otros.
Los investigadores de la Universidad de Chongqing desarrollaron este tejido junto a científicos del Instituto Tecnológico de Georgia (EEUU) y publicaron sus resultados en la revista científica Nature Energy este mes.
Los científicos chinos explicaron a la prensa local que todavía tienen pendientes las pruebas para determinar cuánto dura esa función en el tejido, pero ya han comprobado que puede doblarse 500 veces sin perder su efectividad.