Ya como presidente electo de Brasil, el ultraderechista Jair Bolsonaro mezcló promesas de respeto a la Constitución con críticas a la izquierda y referencias religiosas ante la "misión de Dios" que le fue encomendada.
"Hago de ustedes mis testigos de que este gobierno será un defensor de la Constitución, la democracia y la libertad", dijo Bolsonaro este domingo tras conocerse su victoria en el balotaje presidencial que disputó con el izquierdista Fernando Haddad.
"Eso es una promesa, no de un partido, no es la palabra vana de un hombre, es un juramento a Dios", añadió el exmilitar en un mensaje televisado desde su casa en Río de Janeiro tras obtener 55% de los votos válidos.
Sin anuncios concretos sobre medidas que tomará al asumir el 1º de enero de 2019, Bolsonaro pareció responder de esa forma a las dudas que su elección genera dentro y fuera de Brasil sobre el respeto a la democracia y los derechos humanos bajo su gobierno.