Desde hace ya algunas actualizaciones que el cambiar de versión de Windows genera grandes problemas sobre todo, en el mundo de los videojuegos es uno de los que ha experimentado mayor cantidad de afectaciones con el aumento de popularidad de Windows 11. De hecho, según los últimos datos de Steam el sistema operativo de Microsoft ha superado a su predecesor en popularidad entre los jugadores. Este cambio de preferencia se debe en gran medida a las constantes mejoras que la empresa desarrollada por Bill Gates ha implementado en su nuevo sistema operativo.
Una de las áreas en las que Windows 11 ha buscado mejorar es en la optimización del tiempo de arranque. Consciente de la importancia de un inicio rápido para una experiencia de usuario fluida, Microsoft ha publicado una guía detallada con consejos prácticos para acelerar el encendido de nuestros equipos.
¿Cómo lograr un arranque más rápido en Windows 11?
La primera recomendación de Microsoft es reducir el número de aplicaciones que se inician automáticamente. Para ello, basta con acceder a la configuración de Windows, dirigirse a la sección de aplicaciones y desactivar aquellas que no sean esenciales.
Si te consideras un usuario avanzado, la recomendación que Microsoft te sugiere utilizar es la herramienta Ejecutar (Windows + R) y escribir comandos como “shell:startup” o “shell:common startup” para acceder directamente a las carpetas de inicio y personalizarlas a nuestro gusto. Sin embargo, es crucial tener precaución al modificar estos directorios, ya que eliminar programas esenciales puede causar problemas en el sistema.
Al seguir estos consejos, los usuarios pueden experimentar una reducción significativa en el tiempo de arranque de sus equipos y una mejora general en el rendimiento. Un sistema que inicia más rápido no solo ofrece una mejor experiencia de usuario, sino que también puede prolongar la vida útil de los componentes.
