El informe forense que revela las causas de muerte de los cuatro niños del caso Las Malvinas, (Nehemías Arboleda, Steven Medina, Ismael y Josué Arroyo), ha generado gran controversia.
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Según el abogado Abraham Aguirre García, representante del Comité Permanente por la Defensa de los Derechos Humanos, dio a conocer a Metro Ecuador el análisis forense confirma que las muertes fueron violentas, con indicios de tortura y disparos.
El informe forense y las contradicciones
El abogado Aguirre indicó que el informe forense señala que “la muerte es una muerte evidentemente violenta”, con elementos concluyentes que sugieren que los proyectiles fueron disparados en vida.
En cuanto a los hallazgos, destacó que uno de los niños presentó un golpe contundente en el cráneo y en la zona del maxilar, lo que sugiere actos de tortura previos a la muerte.
Además, Aguirre precisó que se realizaron pericias médicas para determinar si estas lesiones fueron infligidas antes o después de la muerte. “Existen amputaciones térmicas, producto del abrasamiento ocasionado por el fuego, lo que indica que los cuerpos fueron calcinados”, mencionó el abogado, quien también apuntó que este tipo de lesiones dificultan el análisis médico.
La solicitud de nuevas pericias
A pesar de las conclusiones iniciales, Aguirre destacó que el informe forense aún no determina con claridad la causa de muerte. “Se va a solicitar una ampliación del informe, y además, una metapericia debido a las contradicciones encontradas en los hallazgos”, señaló el abogado. Agregó que la Fiscalía está trabajando en otras pericias que podrían arrojar más detalles sobre las circunstancias del caso.
El abogado también mencionó que la Fiscalía debe examinar el uso de acelerantes en la incineración de los cuerpos. “Será crucial saber qué tipo de combustiónante se utilizó para incinerar los cuerpos”, agregó.
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¿Hubo tortura antes de la muerte?
Una de las preguntas clave en este caso es si las víctimas fueron torturadas antes de ser asesinadas. Según Aguirre, las pruebas indican que sí hubo tortura. “Las trayectorias balísticas encontradas sugieren que los disparos fueron hechos de atrás hacia adelante, lo que podría indicar que las víctimas estaban en una posición de cuclillas al momento de recibir los disparos”, explicó el abogado.
Investigaciones en curso
En cuanto a las investigaciones, Aguirre recalcó que tanto los militares como los grupos delictivos organizados (GDO) podrían tener responsabilidad en estos crímenes.
Sin embargo, enfatizó que la investigación sigue siendo confidencial y aún no se han confirmado detalles precisos sobre la participación de las Fuerzas Armadas o de otros actores.
“Aunque no podemos dar detalles sobre los avances de las investigaciones, es importante resaltar que están siendo procesadas varias personas, incluidas aquellas que no pertenecen a las Fuerzas Armadas”, declaró Aguirre.
Además, el abogado confirmó que recientemente se realizaron pericias a los teléfonos celulares de los 16 militares procesados, aunque no pudo dar más detalles al respecto debido a la confidencialidad de la audiencia. “Una vez que la pericia sea pública, los detalles serán accesibles para la comunidad”, concluyó.
