La fanesca, un plato emblemático de la Semana Santa Ecuatoriana, se convierte en el centro de esta campaña, simbolizando la unión familiar, la tradición y la solidaridad.
La Fundación Jonathan invita a todos a disfrutar de este exquisito manjar y, al hacerlo, contribuir a una noble causa: recaudar $8.000 dólares para aportar a los programas y proyectos de alimentación, nutrición y salud, destinados a mejorar la calidad de vida de 750 niños, niñas y adultos mayores, madres solteras y personas en situación de calle que son atendidos por la Fundación.
“Con cada plato de fanesca, estamos ofreciendo mucho más que un alimento; estamos brindando esperanza y mejorando la calidad de vida de quienes más lo necesitan”, expresó Catalina Avilés, directora de la Fundación Jonathan.
“Esta campaña es una oportunidad para que la comunidad se una a un acto de generosidad compartida”. Los fondos recaudados se destinarán a:
• La adquisición de sillas de ruedas posturales para niños con discapacidad para mejorar traslado y movilidad.
• La compra de tanques de oxígeno, medicinas e insumos especiales, esenciales para aquellos pequeños que enfrentan problemas respiratorios y enfermedades catastróficas.
• Compra de alimentos como proteínas, conservas, granos, frutas y verduras para el programa de alimentación y nutrición que cada día ofrece a los usuarios 400 raciones alimenticias de desayuno, almuerzo y refrigerio.
Cómo adquirir la fanesca
• Porción de Fanesca: $ 7 dólares, con higos o molo.
• Servicio a domicilio sin recargo a partir de 5 porciones.
• Pueden realizar sus pedidos al: WhatsApp 0999713078 o solicitar por medio de las redes sociales de Fundación Jonathan.
Acerca de la Fundación Jonathan
La Fundación Jonathan es una organización sin fines de lucro con 24 años de trayectoria, dedicada a brindar apoyo y asistencia a personas en situación de vulnerabilidad, especialmente niños, niñas y adultos mayores.
A través de diversos programas y proyectos sociales, la fundación trabaja incansablemente para generar un impacto positivo y duradero en sus vidas
