La madrugada del 6 de marzo de 2025 marcó el fin de una serie de asaltos a buses urbanos en Quito, tras la detención de siete personas involucradas en los robos. La operación policial fue el resultado de meses de investigación, durante los cuales se rastrearon una serie de asaltos cometidos entre enero y febrero del mismo año en diferentes sectores de la capital.
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Fechas y sectores afectados por los asaltos
Los hechos delictivos que desencadenaron la intervención de las autoridades ocurrieron en varias fechas y zonas de Quito, donde la banda utilizaba el mismo modus operandi: abordaban los buses y, mediante intimidación con armas de fuego y blancas, despojaban a los pasajeros de sus pertenencias.
- 14 de enero de 2025: El primer asalto documentado ocurrió en el sector de Puengasí, donde los delincuentes robaron a los pasajeros de un bus, llevándose dinero, celulares y otros objetos personales.
- 16 de enero de 2025: Dos días después, en San Martín, otro asalto se registró en un bus de la misma manera.
- 18 de enero de 2025: Nuevamente en San Martín, se dio otro robo, en el que los miembros de la banda aprovecharon la oportunidad para cometer un asalto similar al de los días anteriores, actuando rápidamente antes de que los pasajeros pudieran reaccionar.
- 31 de enero de 2025: El siguiente asalto ocurrió en La Lucha de los Pobres.
- 7 de febrero de 2025: El último asalto antes de la captura de los delincuentes tuvo lugar en La Argelia, otro sector de Quito, donde la banda continuó con su modus operandi y robó a los pasajeros sin que pudieran defenderse.
Estos asaltos fueron ampliamente divulgados en redes sociales a través de videos que mostraban los momentos de los robos, lo que permitió a la Unidad Nacional de Investigación de Delitos Contra la Propiedad iniciar la investigación y dar con los responsables.
Desarticulación de la banda
Tras tres meses de investigación, la policía realizó 11 allanamientos en distintos puntos de Quito, lo que llevó a la captura de los siete sospechosos, incluyendo a un menor de edad. La operación, denominada “FIRMEZA I”, también permitió la incautación de armas de fuego y blancas, dinero en efectivo, 131 celulares, droga y otros objetos relacionados con los robos.
A pesar de la detención de estos individuos, las investigaciones continúan para determinar si más personas están involucradas en los asaltos y si la banda tiene relación con otros casos en la ciudad.
