Freddy Herrera, un hombre hispano de 37 años, acudió al médico debido a una molestia estomacal que inicialmente pensó que se debía a algo que había comido. Sin embargo, tras someterse a una serie de exámenes, los médicos detectaron algo mucho más serio: las primeras señales de cáncer colorrectal.
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En entrevista con Univisión, Herrera explicó que, al principio, creyó que los dolores abdominales eran el resultado de una mala digestión, ya que muchas veces tenía que comer en la calle debido a su trabajo. A pesar de sentirse saludable, los síntomas fueron empeorando, incluyendo deposiciones con sangre, mareos y náuseas, lo que lo llevó a buscar atención médica.
Tras varios análisis, se confirmó que Herrera presentaba los primeros indicios de cáncer colorrectal. Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), este tipo de cáncer afecta a un número creciente de personas menores de 50 años. De hecho, la Sociedad del Cáncer informa que uno de cada cinco diagnósticos de cáncer colorrectal corresponde a personas menores de 50 años.
El diagnóstico fue un golpe inesperado para Herrera, quien comentó que, aunque el médico no quiso adelantar que fuera cáncer, le sugirió consultar con un cirujano especializado. A partir de ese momento, Freddy ha enfrentado ocho cirugías, en las que le han extirpado parte del colon, el hígado, la glándula suprarrenal y los pulmones. También ha tenido que someterse a una reparación de hernia. A pesar de las complicaciones, Herrera afirma haberse recuperado rápidamente de todas las intervenciones quirúrgicas.
¿Qué es el cáncer colorrectal?
El cáncer de colon suele afectar a adultos mayores, aunque puede ocurrir a cualquier edad. Por lo general, comienza como grupos pequeños de células llamados pólipos que se forman en el interior del colon. Los pólipos suelen ser benignos, pero algunos pueden convertirse en tipos de cáncer de colon con el tiempo.
