Amie Wood, una madre de dos hijos en Wolverhampton, Reino Unido, fue diagnosticada con cáncer cervical avanzado en 2022, tres años después de que su prueba de Papanicolaou fuera reportada como “normal”. Un error en la interpretación de los resultados retrasó su tratamiento, permitiendo el avance de la enfermedad.
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Demanda por negligencia médica
Según Daily Mail, el hospital Royal Wolverhampton NHS Trust habría cometido un error en la lectura de la prueba realizada en 2019. Los abogados de Amie, de la firma Irwin Mitchell, señalaron que, si se hubiera identificado a tiempo la presencia de células anormales, habría recibido un tratamiento preventivo antes de que el cáncer progresara.
Como consecuencia, en 2022, Amie requirió una histerectomía para tratar la enfermedad. Tras conocer la causa del diagnóstico tardío, inició una demanda contra el hospital por negligencia médica.
Importancia de la detección temprana
Los especialistas indican que el cáncer cervical suele estar relacionado con infecciones persistentes del virus del papiloma humano (HPV). Amie hizo un llamado a las mujeres para realizarse controles médicos periódicos y evitar complicaciones por diagnósticos tardíos.
