La Agencia Metropolitana de Control (AMC) informó que, en respuesta a una denuncia ciudadana y con el apoyo de la Empresa Metropolitana de Rastro, el Cuerpo de Agentes de Control y la Policía Nacional, suspendió la venta y bodegaje clandestino de productos cárnicos, en una vivienda en el el sector de Chillogallo, al sur de Quito. El operativo dejó como resultado el decomiso de alrededor de 1.000 patas de res que, en su mayoría, se encontraban en mal estado.
Vecinos del barrio Libertad reportaron el almacemiento antihigiénico de carne y patas de res, expuestos al clima y colocados directamente sobre la terraza, lo que provocaba malos olores y una notable proliferación de moscas y roedores. Ante esta situación, los inspectores municipales verificaron que las piezas de res estaban guardadas en un cuarto insalubre, sin cumplir con la cadena de frío requerida para conservar la carne en condiciones óptimas.
La Empresa Metropolitana de Rastro decomisó las patas de res, las cuales serán destruidas al no ser aptas para el consumo humano. Según la AMC, estas acciones buscan proteger la salud de las quiteñas y quiteños, previniendo enfermedades gastrointestinales que pueden ocasionar desde náuseas y dolores abdominales, hasta casos graves de infecciones.
Yesenia Cabezas, líder zonal de la AMC en Quitumbe, informó que “el infractor no contaba con los permisos municipales correspondientes y podría enfrentar una multa de hasta 15 salarios básicos. Además, no presentó la guía de faneamiento, documento que certifica que los productos cárnicos provienen de camales autorizados y cumplen con los protocolos sanitarios establecidos”.
En el 2024, la AMC inició 210 procedimientos de sanción a carnicerías por operar sin los permisos necesarios, clausurando 32 de estos establecimientos por prácticas insalubres, que representan un riesgo para la salud pública y el bienestar de los consumidores.
