El cantón Rumiñahui, en el Valle de Los Chillos, recibió nueva maquinaria adquirida por la municipalidad, marcando un hito en el desarrollo de infraestructura vial tanto en zonas urbanas como rurales. El convoy recorrió las avenidas General Enríquez, Calderón y Juan de Salinas, culminando en el ejido frente al colegio Juan de Salinas, donde líderes parroquiales y barriales se congregaron para presenciar la llegada oficial del equipo.
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El alcalde Fabián Iza resaltó la trascendencia de esta inversión, indicando que representa el inicio de una nueva etapa para la construcción de obras viales en el cantón. “Por años, la falta de herramientas adecuadas nos limitó. Quisimos llegar más lejos, pero los recursos no nos permitían avanzar al ritmo que nuestra comunidad necesitaba. Hoy, esa barrera queda atrás”, expresó Iza.
Maquinaria adquirida por el Municipio de Rumiñahui
- 3 retroexcavadoras
- 1 cargadora frontal
- 2 motoniveladoras
- 3 minicargadoras
- 2 excavadoras de oruga
- 1 rodillo liso
- 1 terminadora de asfalto
- 1 rodillo neumático
- 1 tractor de oruga
- 1 rodillo doble tándem
- 1 barredora angulable (accesorio de minicargadora)
- 1 martillo hidráulico (accesorio de minicargadora)
Este equipo permitirá implementar un plan integral de asfaltado, mejorar caminos rurales, limpiar quebradas y ríos para proteger hogares, optimizar sistemas de alcantarillado y ejecutar diversas obras por administración directa, reduciendo costos significativamente.
La prefecta Paola Pavón, presente en el acto, elogió la iniciativa del alcalde y subrayó la importancia de la colaboración interinstitucional para el progreso del cantón. “Qué bueno empezar el año con buenas noticias, como la compra de esta maquinaria que nos permita realizaciones colectivas. Deseamos que Sangolquí siga consolidándose y siga siendo un faro en la provincia”, afirmó Pavón.
La adquisición de esta maquinaria no solo representa una mejora en la capacidad operativa del municipio, sino también un compromiso tangible con el desarrollo sostenible y la calidad de vida de los habitantes de Rumiñahui. La comunidad espera que, con estos recursos, se aceleren proyectos pendientes y se atiendan necesidades históricas en infraestructura y servicios básicos.