Alrededor de 18 gatos murieron tras ser envenenados en el sector de Miravalle, en el nororiente de Quito. Los moradores del sector indicaron que el responsable de este atroz acto utilizó un insecticida muy peligroso y les dio de forma indiscriminada a los felinos comunitarios.
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Los gatitos eran cuidados por los vecinos de la urbanización y al enterarse de lo ocurrido trataron de salvarlos pero fue demasiado tarde. “Estaban vivos, sanos, hermosos, esterilizados”, dijo una moradora a Teleamazonas.
Pero, indicaron que no es el primer caso de envenenamiento masivo. En noviembre 2023, en cambio, 25 gatos fueron envenenados de la misma manera. Incluso, la persona que utilizó el veneno el sobrante en una residencia, por lo que temen sacar a sus mascotas a las calles y sobre todo si están viviendo cerca de una persona que posiblemente tenga un desequilibrio mental.
Tras el trágico suceso, los moradores pintaron un mural con el nombre de todos los gatitos que fallecieron y ahora plantean pintar otro mural.
Además, piden ayuda para poder dar con el o la responsable. Se colocado la denuncia respectiva en la La Unidad de Bienestar Animal (UBA) y sobre todo el acompañamiento legal para que el caso no quede impune.
Ante eso, la UBA ya investiga el hecho porque el hacerle daño a un animal, e incluso provocar su muerte tiene sanciones en el Código Municipal como 10 Salarios Básico Unificados. Es decir, son más de $4.000 los que deberá pagar la persona responsable en este segundo caso de envenenamiento.
