Ismael, Josué, Saúl y Steven nunca imaginaron un partido de fútbol aquel domingo 8 de diciembre los llevaría a enfrentar una experiencia aterradora junto a sus familias. Se cumplen 13 días de su misteriosa desaparición tras un supuesto operativo militar en Las Malvinas, Guayaquil.
“Devuélvanme a mis hijos, tengan misericordia” pide en llanto, Luis Eduardo Arroyo, padre de dos de los cuatro niños desaparecidos. Los menores fueron a unos terrenos para jugar fútbol, pero no regresaron a casa. Sus nombres son Josué e Ismael Arroyo, ambos hermanos de 14 y 15 años; y sus amigos, Saúl Arboleda, de 15 años, y Steven Medina, de apenas 11 años.
“Quiero que mis hijos vengan, que me digan, ‘mamá, sírveme la comida, tengo hambre’, estoy cansada de que la gente me pregunte qué paso, no sé qué decir, porque no sé nada de ellos”, añade en otro video, la madre de los hermanos Arroyo.
En la denuncia, que colocó el padre de los niños Arroyo en la Fiscalía de Guayas, indicó que los niños fueron presuntamente secuestrados por hombres vestidos con prendas militares, y que habían llegado con fusiles y dispararon al aire.
Uno de los secuestradores envió un mensaje de texto a uno de los padres, y le dijo que recoja a los niños en un sector de Taura, una parroquia de Naranjal donde funciona una base militar.
También se conoció que Arroyo logró hablar con uno de los niños, quien le dijo que presuntos militares los habían retenido, golpeado y luego abandonado en Taura.
Sin embargo, los presuntos secuestradores habían pedido a la familia que no den aviso a la Policía y por eso el padre recibió una segunda llamada donde otra voz de hombre le aseguraba que “la mafia se los llevó”, en referencia a los menores desaparecidos.
Las FF.AA. aseguraron la tarde del 19 de diciembre que están colaborando con las autoridades para esclarecer el caso, y que han dispuesto tres medidas concretas para esto, aunque no dijeron cuáles eran.
La Policía indicó que actualmente en la zona de Taura se ha detectado la participación de Los Lobos, Los Fatales, Chone Killers, Tren de Aragua y King Diablo. Esta última es nueva, que se formó con una fracción de los Latin King y disidentes de los Chone Killers que están en Durán.