La fiscal general del Estado, Diana Salazar Méndez, reapareció mediante un extenso escrito para responder a la asambleísta Pamela Aguirre, de la Revolución Ciudadana (RC), quien había pedido datos de su ubicación y estatus.
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“Ciertos asambleístas han hecho sus cálculos, saben que en diciembre cumplí mis 40 semanas de embarazo y conocen las consecuencias del nacimiento”, se lee en la misiva.
También cuestiona las últimas declaraciones de la Legisladora: “‘promover el bienestar del recién nacido y de su madre’, finalmente ha dejado ver su verdadero interés: conocer mi ubicación”.
Y aseveró que aquello no es de importancia para la opinión pública, mientras que sí de interés “para las estructuras criminales que quieren acabar con mi vida y la de mi familia”.
Asimismo, lamentó que para algunos sectores políticos sea más importante conocer la ubicación de Salazar, que la de los procesados del caso Metástasis que continúan prófugos.
Aclaró entonces que pese a su periodo de maternidad, el trabajo de la Fiscalía General del Estado no tiene que detenerse, no se ha detenido y no se va a detener. “Los procesos continúan, porque la institucionalidad nunca ha dependido de una persona”.
Por otro lado, destacó el trabajo que ha realizado de la mano con Wilson Toainga, quien se encuentra sustentando los procesos Independencia Judicial, Reconstrucción de Manabí, Purga, Plaga y otros.
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Hizo un llamado a que la atención sea puesta en los “casos importantes”. “Mientras nosotros enfrentamos a complejas estructuras criminales y obtenemos sentencias en los tribunales, otros reciben -entre aplausos y show político- a procesados, sentenciados y prófugos”.
Aseguró que a la Asamblea Nacional ha respondido y lo hará las veces que sea necesario, “pero no violaré la Ley por el capricho de unos cuantos, de los mismos cuantos de siempre”.
