El Gobierno de Colombia anunció este sábado 16 de noviembre de 2024 que retomará el suministro de energía eléctrica a Ecuador para ayudar a enfrentar la crisis energética. Este acuerdo fue comunicado en conjunto por las cancillerías de ambos países, y según expertos, podría aliviar parcialmente los apagones programados que afectan al territorio ecuatoriano.
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¿Cuánto podría reducirse el tiempo de apagones?
Diego Morales, presidente del Colegio de Ingenieros Eléctricos y Electrónicos del Azuay (CIEELA), detalló dos posibles escenarios derivados de esta medida.
En el primer caso, el suministro de 450 megavatios (MW) desde Colombia podría reducir los cortes eléctricos en hasta dos horas por día. Sin embargo, esta energía adicional no permitiría la recuperación del nivel del embalse de Mazar, afectando la capacidad del complejo hidroeléctrico Paute, que actualmente se encuentra fuera de línea.
En el segundo escenario, se mantendrían los cortes de 12 horas durante al menos una semana, permitiendo la recuperación de los niveles críticos del embalse de Mazar, que actualmente está en 2,110 metros. Según Morales, esta estrategia sería técnicamente más adecuada para estabilizar el sistema hidroeléctrico a largo plazo.
Déficit energético: un desafío mayúsculo
Morales subrayó que el déficit energético en Ecuador alcanza aproximadamente los 3,000 MW. El aporte máximo de Colombia, que sería de 450 MW, cubriría menos del 20% de esa demanda. Si el suministro es inferior a esta cifra, el impacto en la reducción de apagones sería aún menor.
Además, Morales señaló que Coca Codo Sinclair opera al 30% de su capacidad, mientras que otros complejos, como Minas San Francisco y Paute, están parcial o totalmente fuera de servicio. Por esta razón, recomendó que la energía importada se utilice prioritariamente para permitir la recuperación de los embalses, evitando que los apagones se prolonguen nuevamente en el futuro.
Energía clave para la recuperación del sistema
Si el suministro de Colombia llega al nivel máximo de 450 MW y se utiliza para reabastecer los embalses, podría evitarse la necesidad de cortes prolongados en los próximos meses. Según Morales, esta estrategia técnica sería esencial para estabilizar el sistema y minimizar los efectos de la crisis energética.
