Islandia es un país alejado en Europa, que en una de sus aldeas recibió una inesperada visita: un oso polar. El animal se encontraba merodeando cerca de una cabaña, mientras hurgaba en la basura de la casa. El oso fue considerado como una amenaza, y con la apresurada decisión por parte de las autoridades que era “imposible reubicarlo”, la policía lo abatió a tiros.
Este triste hecho tuvo lugar en la región noroeste del país, Westfjords, algo que llamó la atención de expertos es el porqué el oso se encontraba allí, pues este animal no es endémico de Islandia. No obstante, este mamífero suele llegar a las costas islandesas flotando sobre icebergs o témpanos de hielo provenientes de Groenlandia.
El oso polar se encontraba buscando comida en la basura, afuera de una casa de verano, cuando una anciana mujer lo descubrió, ella se encontraba sola, entrando en pánico. Helgi Jensson, jefe de policía menciona que la mujer al ver al animal muy cerca, se aterró subiendo rápidamente al segundo piso de su casa.
Según el medio de comunicación británico The Guardian, la señora trató de comunicarse con su hija vía satelital, ella que se encontraba en la capital, Reykjavik. Tras recibir el mensaje de su madre llamó a la policía inmediatamente, ellos consultaron a la Agencia de Medio Ambiente, llegando a la conclusión que el oso era un peligro para la mujer y los oriundos del sector, quienes abandonaron la zona previamente.
El jefe de policía declaró para AP, que esta serie de factores lo empujó a cometer este horrible acto. “No es algo que nos guste hacer. En este caso… el oso estaba muy cerca de una casa de verano. Había una anciana allí”, comentó.
¿Un oso polar en Islandia?
La presencia de osos polares en las costas islandesas, un evento cada vez más frecuente, es un claro indicador del impacto del cambio climático en el Ártico. El retroceso del hielo marino debido al calentamiento global está obligando a estos grandes mamíferos a desplazarse hacia el sur en busca de alimento.
Los icebergs que se desprenden de los glaciares groenlandeses sirven como improvisadas balsas para estos osos, transportándolos a grandes distancias. La mayor frecuencia de estos eventos plantea desafíos tanto para la conservación de la especie como para la seguridad de las comunidades costeras.
El cambio climático está aumentando la frecuencia de avistamientos de osos polares en zonas inusuales. Un estudio de 2017 relaciona esto con la disminución del hielo marino, que obliga a los osos a buscar alimento en tierra firme.
La pérdida de hielo marino está llevando a los osos polares a buscar alimento en tierra, lo que a su vez aumenta la probabilidad de encuentros con humanos. Aunque los ataques son muy raros, la tendencia al alza de estos incidentes es preocupante.
Los datos muestran un incremento alarmante en los ataques de osos polares en los últimos años. De los 73 ataques registrados en el período analizado, el 20% ocurrió en los últimos cinco años, lo que indica una clara tendencia hacia un mayor conflicto entre humanos y estos grandes mamíferos, atribuible en gran medida al cambio climático.