Los periodistas Andersson Boscán y su esposa Mónica Velásquez anunciaron formalmente que han pedido asilo en Canadá de manera definitiva y que ya no se encuentran en Ecuador debido a que su vida corre peligro.
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En un video publicado por su medio digital, del cual dirigen y son socios fundadores, indicaron que la Policía Nacional ha realizado seguimientos a sus hijas y que han planificado un atentado en su contra. En el clip mostraron los documentos como respaldo a lo dicho.
Los dos comunicadores informaron que su salida ha sido por “muchas amenazas”, tras denunciar actos de corrupción y por eso han tenido que buscar un sitio para protegerse.
“Esta dura decisión se ha tomado por recomendación de varias organizaciones internacionales expertas en la protección de periodistas, luego de analizar la situación de nuestros compañeros y la persecución del crimen organizado particularmente de la Fiscalía General del Estado y los opacos cuerpos de Inteligencia”, dice el comunicado.
“A esto se suma la vinculación al coro de criminalización del periodismo de Fundamedios, varios comunicadores y medios que han apostado por defender al poder, por sobre la vida y seguridad de sus colegas”, reseñan.
Por su parte, Velásquez denunció que en los últimos años no han podido salir de su casa. Incluso, Boscán mencionó que drones sobrevolaban cerca del cuarto de sus hijas. También señalaron que las amenazas llegaban cada semana.
