Una ONG en Nueva Zelanda repartió por equivocación caramelos sabor a piña contaminados con dosis potencialmente letales de metanfetamina al público.
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Un niño, un adolescente y un trabajador de la organización benéfica buscaron tratamiento médico después de probar los caramelos, aunque ninguno está actualmente en el hospital, informó el Detective Inspector Glenn Baldwin de la policía de Auckland.
Los dulces repartidos por un miembro desconocido del público, fueron estudiados por la organización benéfica New Zealand Drug Foundation, la cual halló que contenían potencialmente letales 3 gramos (0.1 oz) de metanfetamina.
“Una dosis común para tragar está entre 10-25mg, por lo que este chupetín contaminado contenía hasta 300 dosis”, dijo la Directora Ejecutiva de la fundación, Sarah Helm.
La policía creía que los dulces eran el subproducto de una operación internacional de tráfico de drogas y han pedido que se los entreguen a las autoridades. También están investigando cómo los dulces ingresaron al país, dijo Baldwin.
