La Contraloría General del Estado registro dos contratos de seguridad firmados por la Empresa Pública Metro de Quito entre 2018 y 2023 con irregularidades. Se encontraron diferentes anomalías que se repiten en dos procesos de contratación que tuvieron como objetivo brindar el servicio de vigilancia y seguridad privada a la Empresa Púbica Metropolitana Metro de Quito.
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Estos contratos fueron firmados el 18 de octubre de 2019 y 7 de mayo de 2021, ambos durante la administración de Jorge Yunda.
La Contraloría indica que por ejemplo, a que las empresas contratadas no presentaron los documentos que certifiquen la experiencia mínima laboral de los guardias, así como su formación académica. “La Empresa Metro de Quito tampoco verificó que sus equipos de trabajo tengan la homologación que se requiere para esta actividad”, se explica.
Incluso, la entidad asegura que los funcionarios municipales modificaron los términos de referencia para reducir la experiencia mínima que debía cumplir los guardias. La empresa Metro de Quito tampoco consideró el tipo de armas eléctricas que deben portar los guardias, ni los certificados de acreditación de su estado de salud, salud mental y antecedentes penales.
La Contraloría también determinó que en los procesos de contratación se obviaron el número de uniformes que debía tener cada guardia, sus carnés laborales y la ubicación de las oficinas de las empresas a las que pertenecen.
También refieren que algunas empresas que participaron en el concurso, no presentaron documentos que certifiquen que eran compañías dedicadas a esta actividad.
El presupuesto referencial pasó de USD 136.000 a USD 230.400, es decir se aumentó en uno de los contratos firmados en 2021, pese a que no hubo justificación técnica. “Las reformas presupuestarias no fueron motivadas y tampoco se justificó el hecho de que el presupuesto inicial fue insuficiente”, dice la entidad.
