Horas antes de ser asesinada a tiros, Landy Párraga estuvo en una boda junto su novio, el cirujano plástico José Luis Betancourt. A través e sus historias de Instagram, se pudo observar que era el matrimonio de Jhoa Chong-Qui, exviceprefecta de Los Ríos, con Jefferson Ruiz, la noche del 27 de abril.
Al día siguiente y luego de la denominada “boda del año” ocurrió el hecho que asombró al Ecuador. La reina de belleza fue acribillada en una cevichería de un centro comercial. Esto ocurrió pasado el mediodía del 28 de abril, mientras desayunaba también junto a su novio.
En uno de los videos que se ha difundido enredes sociales se puede ver que su novio estaba consternado por la impactante escena. En los exteriores del local se vio a ciudadanos llorando a una de las personas más reconocidas de Quevedo.
Su trayectoria como reina de belleza empezó desde su adolescencia. En su etapa colegial fue reina de su parroquia, el sector La Venus en 2018. Al año siguiente fue virreina de Quevedo.
La Fiscalía, al respecto, informó sobre las diligencias del levantamiento del cadáver. Además, dispuso las primeras diligencias para determinar responsabilidades.
Trayectoria
Landy en su adolescencia fue reina de su parroquia, el sector La Venus en 2018. Al año siguiente fue virreina de Quevedo. Participó en el América Caribbean Ecuador y Miss Teen Sea Ecuador.
En 2022 concursó por la corona de Miss Ecuador. Ese año quedó como quinta finalista y ganó Nayelhi González. Landy era comunicadora social a sus 23 años. También fue Señorita Turismo de Quevedo 2019 y Miss Mesoamérica Ecuador 2022.
Caso Metástasis
En enero de este año, Landy fue mencionada en los chats entre Leandro Norero y su abogado Heliver Angulo, alias ‘Estimado’, publicados por la Fiscalía dentro de la investigación caso Metástasis.
En una de esas conversaciones, alias ‘Estimado’ le dijo a Norero que uno de sus contactos en la Policía le preguntó por una mujer a la que el Ministerio Público iba a relacionar con él.
Angulo mencionó que en las investigaciones Landy figuraba como dueña de una importadora, lo que la vinculaba al caso de Norero por lavado de activos.
Sin embargo, Norero insistió en que la importadora no le pertenecía a Párraga y manifestó su preocupación por cualquier asociación de su nombre con él.
