Este jueves 28 de marzo, Mayra Salazar dio su testimonio en el caso Metástasis. La mujer de 35 años empezó expresando su arrepentimiento y ha sido la única persona que ha colaborado, a pesar de tener varios atentados contra su vida. Cinco para ser exactos y el último fue la noche del miércoles 27 de marzo con una alerta de bomba en el centro de privación de libertad donde está encuentro recluida, en el sur de Quito.
Mencionó que entregará su testimonio en dos partes, lo que tiene que ver con las personas procesadas en Metástasis y la siguiente será la identidad, nombre y forma de operar de la persona que por varios años “ha manejado el sistema judicial de la provincia de Guayas, la alcaldía, el Registro Civil”.
“Me equivoqué, pequé de pensamientos, de deseo, pero nunca de acción (...) No me quiero quedar en el error. En este caso son más de 50 procesados, de los cuales he sido la única que ha decidido poner fin a esto”.
El día que su vida cambió
Mencionó todos los lugares donde ha trabajado y que en una temporada de su vida, en 2017, lo hacía con artistas. Uno de los conciertos era de Gloria Trevi y ella quiso ir a un centro de privación de libertad para compartir experiencias de vida con las reclusas y ese día fue a primera vez que entró a un Centro de Privación de Libertad Femenino en Guayaquil.
Mencionó que en esa visita evidenció la necesidades de las privadas de libertas y quiso ayudar con talleres y brigadas médica y fue ahí donde conoció a la esposa de alias Rasquiña, Samara Rivera, quien la llevaría a mantener los nexos con los narcotraficantes.