En un operativo militar en el sector La Floresta, de la ciudad de Guayaquil, fue capturado Jeremy Zambrano, alias ‘Frenillo’. De acuerdo con las Fuerzas Armadas, el sujeto es uno de los cabecillas de la organización terrorista ‘Mafia 18′.
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En una publicación de la cuenta de X de las FF.AA. aseguran que ‘Frenillo’ es hijo de George Samir Maestre Mena (+), alias ‘Samir’ o ‘El Gordo’, quien en vida fue socio de Leandro Norero.
De acuerdo con registros de medios locales, ‘Frenillo’ tiene antecedentes por tenencia de armas y secuestro en 2019, así como un proceso por asesinato, en 2023.
El año pasado, ‘Frenillo’ habría sido el objetivo del ataque armado registrado en julio en Guayaquil. Sujetos armados lo abordaron y le dispararon con fusiles cuando ‘Frenillo’ salía de un hotel de la zona céntrica.
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Tiene 24 años y se presume que fue atacado por una banda de Durán. Tras el ataque, se mantenía bajo custodia policial en una casa de salud.
Su padre
Además, ‘Frenillo’ sería hijo de George Samir Maestre Mena (+), alias ‘Samir’, quien fue asesinado la madrugada del 12 de octubre de 2023 en una de las urbanizaciones más exclusivas de la vía a la Costa, norte de Guayaquil.
‘Samir’, de acuerdo a a lo que se conoce, comenzó con ‘Los Choneros’ y lideraba ‘Mafia 18′, banda delincuencial que está en guerra con ‘Los Lagartos’ por control territorial.
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Fue socio de Leandro Norero Tigua, alias ‘El Patrón’, ambos asumieron muerte del líder de ‘Los Choneros’, Jorge Luis Zambrano, alias ‘Rasquiña’.
De la muerte de Norero se ha desvelado el caso ‘Metástasis’, la mayor operación anticorrupción de la historia de Ecuador, una trama de presunta corrupción judicial, policial y carcelaria entre cuyos procesados está el ahora expresidente del Consejo de la Judicatura, Wilman Terán, además de importantes magistrados.
‘Los Choneros’, ‘Los Lobos’, ‘Los Tiguerones’ y otros variopintos nombres de bandas criminales nacidas en Ecuador están detrás de la escalada de violencia que ha llevado al Gobierno a declararlos como grupos terroristas, con una historia de hegemonías, traiciones y rivalidades por el control del narcotráfico y otras actividades ilícitas.
En ese proceso estas organizaciones han generado nexos con los carteles mexicanos como los de Sinaloa y Nueva Generación, así como con la mafia balcánica, convirtiendo al litoral de Ecuador en una lanzadera de cocaína en lanchas y ‘semisumergibles’ hacia Norteamérica e infectando contenedores de productos de exportación a Europa desde los puertos de Guayaquil y Machala.
Con información de EFE
