En el centro-norte de Quito hay un centro de neurorehabilitación que ya trabaja 27 años con niños que presentan trastornos de neurodesarrollo. “Ayudamos a niños con parálisis cerebral y síndrome de down desde los cero a los ocho años de edad”.
Liliam Acosta, directora del área técnica de este espacio llamado Fudrine, señala que allí se trabaja la terapia de lenguaje, terapia física, ocupacional, estimulación temprana y acompañamiento pedagógico. “Tenemos entre 25 y 30 niños. Todo el personal está capacitado en la neurorehabilitación”, indica.
Al lugar llegan niños con sus papás que también asisten al proceso terapéutico. Las sesiones duran 45 minutos. También se hacen terapias de juego o de grupo para desarrollar otras fortalezas.
“Son los gestos de amor que los niños y sus padres nos dan lo que nos entrega la energía para servirles mejor día a día. En un día frío, el abrazo de estos niños te llena de calor humano”, comenta Acosta.
Ella cuenta a Metro Ecuador que la pasión, el trabajo, el amor hacia los niños, la llevó junto a otras tres cofundadoras a abrir este espacio de apoyo.
“Ninguna tenía personas con discapacidad en la familia, pero fue un don innato que nos invadía. Ahora recordamos a todos los chicos que hemos ayudado, que estos días son abogados, y algunos realizan maestrías”.
Los niños que nacen prematuros tienen más riesgo de parálisis, entonces los padres no deben esperar mucho tiempo y guiarse en las señales para llevarles a este acogedor centro de ayuda. Usted se puede contactar con toda confianza al celular 0989837086.
