Los agentes del FBI se reunieron con los abogados que llevan la investigación del asesinato de Fernando Villavicencio y esperan extraer metadatos de las conversaciones telefónicas mantenidas antes, durante y después del crimen.
Desde el asesinato al excandidato presidencial, su teléfono celular está extraviado. En ese teléfono constan las amenazas que recibió, pero las llamadas telefónicas que recibió y que las hizo crean un rastro digital que puede ser rastreado y analizado por los agentes del FBI y eso es lo que esperan acceder.
Ya que se conoce que cada llamada, mensaje dejan un registro electrónico y esto es pieza clave para la investigaciones en torno al asesinato de Villavicencio.
El celular de Villavicencio no fue encontrado ni en la escena del crimen, ni tampoco en la Clínica de la Mujer, donde fue llevado el político cuando recibió los impactos de bala. “Hay demasiadas cosas extrañas”, acotó Verónica Sarauz, viuda del excandidato, donde dijo que el teléfono es pieza clave para conocer por qué salió antes de que llegue el carro blindado a recogerlo, en una entrevista para un medio internacional.
Por otro lado, Christian Zurita, amigo y ahora reemplazo de Villavicencio en las elecciones anticipadas, dijo en una entrevista para KCH Radio, que considera que el teléfono del político asesinado podría estar a buen recaudo. “A medida que liberemos esta agenda política, nos concentraremos en la metodología para investigar el crimen de Fernando”, indicó.
Por el asesinato de Fernando Villavicencio hay seis colombianos que cumplen prisión preventiva. Un séptimo sospechoso que fue capturado y llegó a ser trasladado a la Fiscalía murió en la Unidad de Flagrancia del norte de Quito. Se realizaron las pericias respectivas a las armas incautadas y se confirmó que una llegó desde Perú y fue utilizada días antes para cometer un doble asesinato en una peluquería en el sur de la capital.
