Una mujer fue sentenciada por envenenar a su compañero de trabajo. Sucedió en la casa de la víctima. Se trata de Marco E. habría ido a su casa junto a Lissa María C. el 11 de junio de 2020. Ambos ingirieron bebidas alcohólicas hasta que él se sintió mal.
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Sus familiares lo hallaron muerto en el piso con espuma en la boca. La mujer ya no se encontraba en el lugar, pero pistas recavadas por las autoridades permitieron establecer su presencia en el sitio.
Una huella dactilar quedó impregnada en una botella de cerveza. Además, sobre la mesa se encontró una jarra de agua contaminada con la misma sustancia tóxica.
Ese detalle convirtió al asesinato de Marco E. en una tragedia más grande. Su esposa e hijos consumieron el agua, mezclada con otro líquido, y terminaron en el hospital.
La mujer también envenenó a sus hijos:
Lissa María C. tiene cuatro víctimas mortales en su haber. Incluidos sus dos hijos de 5 y 9 años a los que también envenenó.
En agosto de 2021 la imputada recibió una pena de 34 años y 8 meses de prisión. Fue la primera vez que llegó ante un tribunal por el delito de asesinato.
A los cuerpos de los pequeños se los encontró el 27 de octubre de 2020 en una vivienda en Pifo, en el nororiente de Quito. Ese mismo día uniformados hallaron un cadáver en descomposición empotrado debajo del lavabo de Lissa María C.
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Fiscalía presentó la acusación con la hipótesis de que la mujer asesinó a Jaime Geovanny Y. y lo envolvió en una cobija para esconderlo.
Por ese crimen, recibió una pena de 22 años de cárcel. Además, según información de Fiscalía, mantiene un proceso por el delito de ingreso de artículos prohibidos a la cárcel. Esto le valió una condena de cuatro meses en prisión.
