Dos asesinatos a sus familiares en cuatro años. Kevin Joel P. P, con solo 19 años mató a su prima de 13, el 10 de mayo en su casa y pretendió enterrarla en el patio trasero de la vivienda. Sin embargo, no es el único delito que cometió ya que a sus 17 años fue sentenciado a 32 meses por haberle quitado la vida a su abuelo.
“Desde el 1 de noviembre de 2019, Kevin, estuvo en el Centro de Adolescentes Infractores en Riobamba y salió en libertad el 20 de diciembre del 2022 tras haber asesinado a su abuelo”, indicó la Fiscalía en un comunicado.
Autopsia reveló que no hubo violación:
Kevin Joel P. P. habría ahorcado con sus manos a la adolescente, hasta causarle la muerte. Luego, escondió el cuerpo de la adolescente en el baño. Tomó una pala y salió al patio de la vivienda, para abrir un agujero en la tierra y enterrar el cadáver.
En ese momento, el padre de la víctima llegó de realizar trámites y al ver a su sobrino excavando le preguntó la razón y el victimario había respondido que buscaba algo. Entonces el hombre llamó por varias ocasiones a su hija sin obtener respuesta. Entró a la casa y la buscó cuarto por cuarto. Cuando llegó al baño la encontró sin vida. Mientras esto ocurría, Kevin Joel P. P. huyó del lugar.
Afortunadamente, agentes de la Policía Nacional aprehendieron a Kevin Joel P. P., en la parroquia Juan Benigno Vela, vía a Tisaleo, el mismo día que cometió el crimen.
En la autopsia médico-legal practicada a la víctima, se determinó una muerte por asfixia mecánica por estrangulamiento; en tanto el informe ginecológico concluyó que no hubo agresiones sexuales como violación.
El sujeto se enfrenta a una pena de privación de libertad de 27 años. La instrucción fiscal durará 30 días.