Una enfermera de 24 años de Florida sorprendió a las redes sociales cuando contó su historia, pues reveló que recibió un devastador diagnóstico ya que acudió al doctor por sus eructos continuos y los doctores le diagnosticaron que padecía un cáncer potencialmente moral.
Bailey McBreen comenzó a eructar hasta 10 veces al día y se dio cuenta que eso “no era normal”. Pero, por varios meses ignoró esta alerta de su cuerpo, para luego comenzar a tener reflujos ácidos y calambres estomacales ‘insoportables’.
Según reseña el diario ‘New York Post’, la joven tenía una vida saludable ya que realizaba ejercicio varias veces por semana y comía bien. Pero, cuando fue al doctor, le diagnosticaron cáncer de colon, lo cual el enterarse la devastó.
Una tomografía computarizada que le practicaron reveló que tenía “cáncer de colon en etapa 3″ y un tumor que obstruía su intestino grueso.”Realmente fue una experiencia extracorpórea”, comentó. “Nunca en un millón de años pensé que cualquier síntoma vago que tuviera fuera en realidad cáncer de colon en etapa 3″, afirmó.
Los eructos eran los síntomas de un cáncer ya que en el caso de la joven, el tumor estaba causando lentamente una obstrucción intestinal completa. Debido a esto, la comida se quedaba atrapada sobre el tumor, lo que provocaba reflujo y eructos excesivos.
Afortunadamente, los médicos lograron extirpar el tumor de su intestino y la joven enfermera tuvo que tomar quimioterapias desde enero hasta agosto. “Todo el viaje ha sido una montaña rusa de emociones. Mi diagnóstico ha impactado mi vida en todas las formas posibles que te puedas imaginar”, lamentó.
Actualmente, la joven se alimenta completamente orgánico y ahora es más consciente de su cuerpo. “Ahora, todo lo que me importa es pasar tiempo con la familia, comer sano, mi fe y rodearme solo de mi grupo principal de amigos”, dijo. “La vida es demasiado corta para estar constantemente complaciendo a la gente y haciendo cosas que no te hacen sentir satisfecho”, concluyó.
