La misma ministra de Educación, María Brown, reconoció que el suicidio de Johanna pudo evitarse ya que las autoridades del Colegio Mejía, tenían “suficientes insumos” que daban cuenta de que la joven de 16 años era víctima de acoso estudiantil. Sin embargo, hasta el cierre de esta nota, no han sido sancionados ni removidos de su cargo.
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Lo que dijo la ministra coincide con la versión de la familia de la víctima: las autoridades nunca hicieron nada, pese a las denuncias que hizo Johanna sobre sus compañeros, quienes la golpeaban y la insultaban.
Por su parte, Brown indicó que las autoridades del colegio Mejía incurrieron en faltas como negligencia y omisión; por lo que ya se ha realizado un informe que podría sancionarlos de ser encontrados responsables.
Estas personas todavía siguen vinculadas al Ministerio de Educación, aunque podrían ser removidas si se confirma su negligencia.
En el 2022 se detectaron 607 víctimas de acoso escolar, 57 suicidios y más de 4.009 casos de violencia sexual, indicó el Ministerio de Educación. Ante eso, dijo la autoridad que la violencia en el sistema educativo no es nuevo y que han socializado con la comunidad educativa sobre la necesidad de que las víctimas hagan denuncias y que las autoridades sigan la hoja de ruta.
¿Quiénes serían las autoridades que no hicieron nada por el suicidio de Johanna?
En el caso de la estudiante del Colegio Mejía las investigaciones apuntan al maestro tutor de curso, personal del DECE y rector. Aún no se ha determinado un tiempo en el que se determinará si fueron o no negligentes
