El pleno del Consejo de la Judicatura suspendió por unanimidad al juez que dejó en libertad condicional al presunto cabecilla de la banda criminal autodenominada “Los Tiguerones”, de nacionalidad colombiana, detenido por su presunta relación con una matanza de 9 personas y supuestos nexos con disidencias de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC).
El magistrado suspendido formaba parte de la Unidad Judicial Multicompetente de lo Penal del cantón Quinindé, en la provincia de Esmeraldas, situada en la costa norte de Ecuador, fronteriza con Colombia.
La suspensión estará vigente por un plazo máximo de tres meses y, durante ese tiempo, el juez no percibirá remuneración alguna.
El Consejo de la Judicatura explicó en un comunicado que la decisión fue adoptada el martes “a fin de evitar posibles vulneraciones a los derechos de los justiciables dentro de las causas puestas en conocimiento del mencionado juez”.
De acuerdo a los antecedentes analizados, el juez no tomó los recaudos necesarios para garantizar la realización de la audiencia de juzgamiento, en procedimiento directo.
Según el Consejo de la Judicatura, el detenido, identificado por las autoridades como alias “Elbi”, tenía una orden de prisión dictada en agosto de 2021 por no haberse presentado a la audiencia relacionada con otra causa, en la que está procesado por el presunto delito de tenencia y porte de armas.
El argumento esgrimido por el juez para dejar en libertad condicional al detenido fue que los abogados públicos no habían sido notificados con al menos 72 horas de antelación de la audiencia de presentación de cargos, por lo que aplazó la vista y ordenó hasta entonces una comparecencia periódica del procesado ante el juzgado.
El Ministerio del Interior y la Policía Nacional criticaron el martes fuertemente la decisión del juez al considerar que desbarata los esfuerzos de policías y militares para combatir la violencia del crimen organizado en el país.
La captura de Elbi se produjo el pasado lunes en una serie de allanamientos realizados por las Fuerzas Armadas, la Policía y la Fiscalía en un barrio del cantón (municipio) de San Lorenzo, muy cerca de la frontera de Ecuador con Colombia.
Los allanamientos se realizaron en el marco del estado de excepción decretado por el Gobierno en la provincia de Esmeraldas desde el 3 de marzo, para contrarrestar el repunte de asesinatos y muertes violentas, al registrar 70 homicidios entre enero y febrero, vinculados supuestamente al crimen organizado y el narcotráfico.
El estado de excepción declarado en Esmeraldas por 60 días permite el despliegue de las Fuerzas Armadas en apoyo a las labores de la Policía para restablecer y mantener el orden interno y suspende derechos fundamentales como el de reunión e inviolabilidad del domicilio.
De acuerdo a las Fuerzas Armadas, “Elby” no solo tenía liderazgo dentro de “Los Tiguerones”, sino también nexos con la “Columna Móvil Urías Rondón”, uno de los grupos disidentes de las FARC.
Asimismo, las autoridades ecuatorianas lo señalan como uno de los supuestos ordenantes de la matanza perpetrada la semana pasada en el puerto pesquero de Esmeraldas, donde un grupo de 30 hombres armados irrumpieron en el lugar para disparar indiscriminadamente a los presentes, con un saldo de 9 muertos, entre ellos un colombiano.
Según el Gobierno, esta acción se dio por una aparente disputa entre “Los Tiguerones” y otra banda criminal por el control de esa zona, que se encuentra además dentro de la ruta del narcotráfico, utilizada para hacer llegar grandes cantidades de cocaína a Norteamérica y Europa desde los puertos ecuatorianos.