El asesinato del representante internacional de la Confederación de Nacionalidades Indígenas del Ecuador (CONAIE), Eduardo Mendúa, conmocionó a la población. Tras el hecho ocurrido en la comunidad Cofán Dureno, en Sucumbíos, la tarde de este 26 de febrero, Naciones Unidas (ONU) se pronunció y pide que se realice los respectivos proceso para dar con los responsables.
Desde su cuenta de Twitter, Eduardo Calí Tzay, relator especial de los derechos de los pueblos indígenas de la ONU, dio un pronunciamiento:
“Condeno este hecho, a la vez solicito la pronta acción de las entidades de Justicia para que el caso no quede impune En este momento de dolor envío mi solidaridad a la familia”, indicó.
Mendúa se encontraba en su hogar, cuando sujetos encapuchados ingresaron y dispararon varias veces en su contra, provocando así su deceso.
Las últimas palabras del líder indígena asesinado
En una grabación, el líder hace público una supuesta provocación del Gobierno Nacional con la comunidad Cofán Dureno, donde, sin consulta previa, se habría intentado ejecutar actividades extractivas.
“Quiero que la comunidad internacional intervenga, porque es la única área verde de la comunidad Cofán Dureno, que es donde vivimos”, aseguro.
Asimismo, denunció: “El Gobierno, por medio de su empresa pública, asesina, inició esta guerra entre hermanos y esto puede continuar. Nos quieren exterminar a los cofánes.
“Por lo tanto, le pido a todos los medios, a todas las organizaciones de derechos humanos también a que den a conocer este tipo de atropellos. Esto es responsabilidad del Gobierno Nacional. Si llegan a morir nuestros compañeros heridos es responsabilidad de ellos”.