Luego de 18 meses de investigación de la DEA, la Policía Nacional y la de Colombia, se logró la captura de Emilio Sánchez alias “Gato Farfán” o “Jerry”, quien es considerado como uno de los narcotraficantes con más poder en la región ya que es el cabecilla del cartel Nueva Generación en Ecuador.
Fue detenido en Pasto, cuando circulaba en su camioneta de alta gama. Actualmente tiene 42 años y mantiene el control del Pacífico y nexos con los carteles mexicanos más grandes.
Según el Gobierno de Estados Unidos, el ‘Gato Farfán’ ha enviado grandes toneladas de cocaína del cartel de Sinaloa, en México. “Sánchez Farfán ha enviado representantes de su organización a México para reunirse con miembros del Cartel Jalisco Nueva Generación (CJNG), para establecer una relación de trabajo para importar cantidades de varias toneladas de cocaína a México desde Ecuador”, fue lo que indicó el año pasado la Oficina de Control de Activos Extranjeros (OFAC) de los Estados Unidos.
Su nombre comenzó a sonar hace 10 años
Hace 10 años, la Policía lo detuvo con el Operativo Galaxia, cuando intentaban enviar media tonelada de cocaína a México en El Empalme, norte de Guayas. Sin embargo, en ese tiempo las autoridades estaban enfocadas en la captura de Telmo Castro, excapitán del Ejército de Ecuador que fue involucrado en el caso y que tenía nexos con Sinaloa y el ‘Chapo’ Guzmán.
En ese tiempo, el Gato era la mano derecha de Castro, pero recordemos que fue asesinado hace tres años en la Penitenciaría del Litoral.
Luego de la muerte de Castro, el Gato comenzó a crear su propio imperio y fue proveedor de droga al cartel de Sinaloa y al cartel Jalisco Nueva Generación, por lo tanto es considerado como uno de los narcotraficantes más temidos de la región.
Registra antecedentes penales desde el 2013:
La Función Judicial registra nueve procesos contra Farfán. En el 2013 fue sentenciado a cuatro años de cárcel por le envío de estupefacientes. Luego, la Corte de Guayas le subió un año más de condena, pero al final, el detenido estuvo casi dos años y en 2016 salió de prisión por el beneficio de prelibertad.
Ni bien salió de la cárcel, el Gato siguió con fuerza en el narcotráfico, tanto así que Estados Unidos ya lo identificó y lo catalogó como uno de los más importantes de Sudamérica.
Flota de aviones privados, buques marítimos y más para enviar la droga
La DEA presumía que el narco trabajaba desde Guayaquil con la droga que enviaban desde los laboratorios del sur de Colombia. Los cargamentos salían desde Ecuador a América Central, México y a Estados Unidos a través de aviones privados, embarcaciones marítimas, contenedores comerciales y vehículos terrestres.
Así fue como se convirtió en el principal proveedor de cocaína para el cartel de Sinaloa, según lo dio a conocer la Oficina de Control de Activos Extranjeros de Estados Unidos. Estados Unidos dispuso el bloqueo de todas las propiedades e intereses en los bienes de ambos que se encuentren dentro de esa nación.