Desde que Natalia Ojeda Rosales y de su pequeña y hija Sabina A., salieron supuestamente de paseo con la expareja y padre de la menor, su familia no ha sabido nada de ellas. Eso fue el 31 de diciembre de 2022. Fueron supuestamente de paseo a Salcedo, Cotopaxi. Del hombre, hasta el momento de esta publicación, también se desconoce su paradero.
La Fiscalía y la Policía informaron en primera instancia que Natalia de 31 años y su nena de un año y medio se encuentran desaparecidas desde el 2 de enero de 2023. Fueron vistas por última vez en las calles Selva Alegre y Las Casas, en Quito. Una vez que se han recabado varias pericias y versiones para dar con la ubicación, se conoció que su último paradero habría sido por el Redondel del Ciclista.
Natalia llevaba separada de su expareja el mismo tiempo que tiene la niña porque -presuntamente- habría sufrido violencia psicológica. Pero, para fin de año tuvo dicho acercamiento con el sujeto. El último compartir de la joven con sus familiares fue en Navidad y en Año Nuevo posteriormente conversó con ellos. Entonces ahí se dio el supuesto paseo a Salcedo, donde vive el abuelo de Sabina.
Hallan el celular de Natalia
El padre de Natalia se comunicó con el papá de su expareja. Le comentó que el 4 de enero se levantó a la madrugada y ya no les encontró en la casa de él, ubicada en Salcedo.
El abuelo de Sabina aseguró en esa conversación que halló el celular de Natalia, un chip y otras pertenencias. Del dispositivo se habría borrado toda la información, por lo que la familia no pudo tener contacto. Por ello comenzaron las preocupaciones y el 9 de enero se interpuso la denuncia.
Debió regresar a trabajar
Lo que ha trascendido hasta el momento es que Natalia es funcionaria del Consejo de la Judicatura. El maltrato psicológico que habría sufrido Natalia trascendió en redes sociales. Amigos y allegados de la chica lo confirmaban hasta colocando el nombre de su expareja.
Allanaron la casa de la expareja de Natalia
La Unidad de Personas Desaparecidas de Fiscalía allanó el domicilio de la expareja de Natalia. En la vivienda, ubicada en el norte de la capital, los funcionarios levantaron indicios como documentos. Así se evidencia en las imágenes que se han subido a Twitter. Dos hojas aparecen sobre una mesa. En el membrete se lee “Función Judicial”.
También aplicaron una prueba de luminol, misma que sirve para identificar indicios de sangre. El resultado fue negativo.