El príncipe Carlos, heredero de la corona británica, está en el castillo de Balmoral (Escocia) junto a su madre, la reina Isabel II. El resto de sus hijos y sus nietos, Guillermo y Harry, están de camino tras conocerse que la soberana, de 96 años, está bajo supervisión médica.
La salud de la Reina desde hace tiempo que experimentaba “problemas de movilidad”. Ahora empeorado a partir que el martes recibió en Balmoral a Boris Johnson, quien le presentó su dimisión como primer ministro, y su sucesora, Liz Truss, al que encomendó la formación de un Gobierno.
En un comunicado, el Palacio de Buckingham informó de que la monarca pese a todo se encuentra “cómoda” y sigue en el castillo de Balmoral.
Entonces, el príncipe de Gales viajó a Balmoral acompañado por su mujer, Camilla, duquesa de Cornualles. El resto de los hijos también se dirigen hacia allí: la princesa Ana del Reino Unido, la única hija de Isabel II; Andrés de York, y Eduardo de Wessex.
Nietos van en camino
El príncipe Harry también se dirige al castillo de Balmoral junto a Meghan Markle para reunirse con el resto de la familia.
Enrique y Meghan, que residen en Estados Unidos, se encontraban esta semana de visita en Europa. Ambos estaban hoy en Alemania, con motivo de una competición deportiva de militares veteranos, y tenían previsto viajar esta noche a Londres para asistir a la entrega de premios de una fundación contra enfermedades infantiles.
Por su parte, su hermano, el príncipe Guillermo, ha viajado a Balmoral desde Windsor, según el palacio de Kensington, la oficina de los duques de Cambridge.
El duque fue visto ayer llevando a sus tres hijos, los príncipes Jorge, Carlota y Luis a su nuevo colegio cerca de Ascot, próximo al castillo real. Guillermo ha asumido más compromisos oficiales para ayudar a su abuela debido a su avanzada edad, así como también Carlos.
Además de los nietos de Isabel II, los cuatro hijos de la monarca -Carlos, Ana, Andrés y Eduardo- están ya en Balmoral o van de camino.
El desplazamiento de los principales miembros de la familia real parece reflejar la gravedad del estado de salud de la reina, que permanece “confortable” en su residencia, según el escueto comunicado que ha publicado el Palacio de Buckingham.
Aunque no se ha detallado el estado de la Reina, el hecho de que sus allegados se hayan desplazado a Balmoral indica que la situación es grave.
Con datos de EFE