De acuerdo con los investigadores, al pez remo se le conoce como pez sable y su nombre científico es Regalecus glesne y ha sido catalogado como el más importante de los arenques: una especie de peces que habita en aguas profundas. A estas se las encuentra a más de mil metros por debajo de la superficie, de acuerdo con National Geographic.
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Es considerado el pez óseo más largo del mundo. Esta especie ha alcanzado una longitud de registro de 11 metros. Pero se han reportado algunos, no confirmados, de hasta 17 metros. Su peso máximo registrado en un pez remo gigante es de 272 kilogramos. Es lo que se tiene hasta el momento porque pese a que los investigadores han querido conocer mucho más sobre su anatomía, la tarea se ha complicado porque es muy difícil encontrarlo.
Otra de sus llamativas características es que el pez remo tiene la forma de una cinta; con una aleta dorsal a lo largo de toda su longitud (desde sus ojos hasta su cola). Se distinguen de los demás por especies delgadas con el rostro chato. Algo que ha llamado la atención de diversos biólogos marinos es que no tienen escamas.
El pez remo tiene boca diminuta con mandíbulas dentadas. Por ello, su dieta se basa en especies pequeñas de peces y calamares. Cuando están enfermos o a punto de morir, suben hasta la superficie hasta agonizar. A veces, también lo hacen para desovar.
La leyenda del pez remo
La leyenda del pez remo se remonta a la cultura japonesa la cual se asocia con la vida de yakoi o monstruos. Se llama “Namazu” que se refugiaba en las profundidades de la nación insular del océano Pacífico. Sus movimientos, cuando salía hacia la superficie causaban terremotos.
Por ello se lo consideraba como un ryugu no tsukai, o traducido al español como “mensajero del palacio del Dios del mar”.
“Terremotos, tsunamis, ciclones y demás desastres naturales se le atribuyeron por años en la cultura japonesa. Esto era así porque se creía que tenía una relación estrecha con las divinidades de los mares”, señala National Geographic.
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Antes de creer ello, la cultura popular decía que poseía la capacidad de comunicarse con los humanos y hasta transformarse en uno de ellos.
También se le llama “pez terremoto” y se puede encontrar en casi todos los mares del mundo (con excepción de los polos).
En las costas japonesas, aún hoy persiste la idea de que los peces remos traerán consigo algún movimiento telúrico nefasto para la población.
Sin embargo, no existe la evidencia científica de que exista una relación real entre los desastres naturales y la aparición de esta especie en las costas.
De hecho, como expuso en su momento el experto en sismología ecológica Kiyoshi Wadatsumi, este tipo de peces suele ser más sensible a movimientos telúricos de fallas activas que aquellos que viven más cerca de la superficie marina.
Augurios antes y después de sismos
En 2011 en Tohoku, en la isla de Honshu, costa del Pacífico, ocurrió un tsunami. Antes del desastre natural ocurrió un avistamiento de una gran cantidad de peces remos.
En 2020 tuvo lugar un terremoto en Alaska de 7.8 grados. Días antes fue avistado un pez remo, mientras que en junio del mismo año México sufrió un sismo de 7.5 grados y 10 días después fue encontrado este extraño animal marino.
A semanas de que fuera capturado un pez remo en las costas de Cozumel, se produjo el movimiento telúrico en ese país. Fue justamente el 11 de junio cuando un grupo de pescadores capturó cerca de la costa un ejemplar de este tipo de pez, lo que causó preocupación y temores en la zona.
La pesca del remo se documentó en el Facebook Macheto Snap Cozumel Surf, y también la subió el usuario Carlos Martín Gaeta, quien se identifica como biólogo marino.
Captura en 2022
El 11 de julio de 2022, un grupo de pescadores capturaron en Arica, costa norte de Chile, un enorme pez remo que medía unos seis metros de largo.
El video de la captura se ha hecho viral en la red social Twitter. Debido a la longitud enorme del pez, tuvo que ser sacado del agua con la ayuda de una grúa que lo remolcó hasta un barco.
Gonzalo Muñoz, investigador asociado al Instituto de Fomento Pesquero (IFOP), “Cuentan con bocas protuberantes y pequeñas, y una aleta dorsal rojiza voluminosa que se extiende desde la cabeza hasta el extremo de la región caudal, entre sus aspectos más distintivos”.
Un día después del avistamiento del pez remo en Arica, la Oficina Nacional de Emergencia del Ministerio del Interior y Seguridad Pública de Chile (ONEMI) confirmaba un sismo de 6.3 puntos a casi 700 kilómetros del noroeste de la Isla de Pascua.
Sin embargo, se aseguró que “no reúne las condiciones necesarias para generar un tsunami en las costas de Chile”. A las pocas horas, se registró una réplica de 5.2 a la misma distancia de la Isla de Pascua.
No solo Chile registró un sismo tras la llegada del pez remo, sino que la tierra tembló también en Perú. El norte del país fue azotado esta tarde por un sismo de magnitud 5.7. De acuerdo al Instituto Geofísico del Perú (IGP), el epicentro se localizó en la provincia de Zarumilla, región Tumbes, en la frontera con Ecuador, en dónde también se sintió.
