El caso de Olivia Knowles es un claro ejemplo de cómo los síntomas de una enfermedad pueden confundirse con los de otra. En 2023, durante el Campeonato Mundial de Medio Ironman en Finlandia, experimentó lo que inicialmente parecía ser una ligera incomodidad.
A pesar de que logró nadar y pedalear sin problemas, durante la carrera final algo no estaba bien, lo que le impidió rendir al nivel al que estaba acostumbrada. Este fue el primer indicio de un problema mayor.
Después de varios meses presentando síntomas persistentes, Olivia acudió a un médico privado que le diagnosticó lo que parecía ser COVID prolongado, una condición en la que los síntomas del virus persisten mucho después de la infección inicial.
Fatiga, dolores musculares y dificultades para concentrarse son algunos de los síntomas comunes de COVID prolongado, pero también pueden confundirse con otras afecciones, como ocurrió en el caso de Knowles.
Sin embargo, la situación empeoró cuando los médicos detectaron la verdadera causa de sus problemas: la leucemia mieloide aguda (LMA), un cáncer de la sangre que afecta a los glóbulos blancos. Esta enfermedad provoca la proliferación descontrolada de células anormales en la médula ósea, lo que impide la producción de células sanguíneas sanas y debilita la capacidad del cuerpo para combatir infecciones.
Desde el diagnóstico, Olivia ha enfrentado una serie de tratamientos intensivos, que incluyen quimioterapia agresiva y una terapia avanzada CAR-T, en la que sus propias células inmunitarias fueron modificadas para atacar las células cancerígenas. También recibió un trasplante de células madre, que parecía haber sido exitoso, hasta que la enfermedad volvió a reaparecer de forma inesperada.
El pronóstico de la deportista es complicado. Incluso uno de los médicos sugirió que considerara viajar a Suiza para someterse a un proceso de muerte asistida. Sin embargo, Olivia decidió luchar, no solo por su vida, sino también por aquellos que podrían beneficiarse de las investigaciones médicas.
Actualmente, Olivia sigue enfrentando un nuevo ciclo de quimioterapia con la esperanza de seguir adelante.