Todos hemos crecido con la idea de que los tigres son animales felinos, por su parecido y familiaridad con los gatos, que son animales domésticos. Sin embargo, expertos explican el verdadero origen de este hermoso animal.
El término “felino” tiene un significado diferente en el lenguaje común del que se tiene en la ciencia. En realidad, “deberíamos referirnos a estos animales como félidos”, indica National Geographic España.
Estos animales son una familia de mamíferos carnívoros que se diferencia principalmente por la forma que tiene el cráneo. Un cuerpo musculoso con extremidades demasiados flexibles.
Según reseña esta página que trata temas profundos sobre animales, “los félidos se dividen en dos subfamilias: panterinos y felinos. La diferencia existente es la capacidad que existe para rugir”.
Otro de los factores que los diferencias es la manera en cómo se desarrolla la musculatura de estos animales. Los felinos pueden ser mucho más esbeltos y ágiles, como naturalmente vemos en nuestros gatos.
