Lo ideal es que cuando los hijos crezcan y estén lejos de sus padres, ya sea porque éstos viven aparte o porque fallecieron, tengan los mejores recuerdos de ellos, a tal punto que solo al evocar la imagen de sus rostros vengan a la mente un sinfín de recuerdos preciosos que los acompañarán toda la vida.
Esto es muy bonito, sin embargo, no es fácil, muchas relaciones entre los padres y sus hijos son complicadas, signadas por la crítica y el conflicto.
Por ello, para lograr lo expresado en el primer párrafo, el Portal sobre crianza Eres mamá recomienda las siguientes acciones:
Pasos a seguir...
- Deséale buenos días apenas abra sus ojitos al amanecer y dile con frecuencia frases de amor como: te quiero, te amo, hablándole de manera respetuosa, haciéndole saber cuán importante es para ti y la familia.
- Mantén habitual contacto físico con caricias, besos y abrazos. Siempre que puedas déjale saber que confías en él.
- Apréndete los nombres de sus personajes animados favoritos e identifica una canción especial para curar sus heridas, golpes o cualquier dolor.
- Sé humilde y pídele disculpas cuando te equivoques.
- Cuéntale historias, léele cuentos o nárrale anécdotas de cuando era más pequeñito.
- Edúcalo con el ejemplo, manteniendo tu imagen de persona honrada, trabajadora, paciente y respetuosa.
- Dedícale frecuentemente tiempo de calidad. Aunque vayan cambiando sus intereses jamás dejarías de pasar tiempo con él.
- Establece reglas que procuren su disciplina y que faciliten su integración con la sociedad.
- Motívalo constantemente para que concrete sus metas no importa qué tan pequeñas o significativas sean.
- Comparte diferentes experiencias como: viajar, jugar y cantar. Estos son excelentes momentos para demostrarle cuanto te importa y lo amas.
- Involúcrate en su formación escolar, comunicándote frecuentemente con su maestro a fin de que juntos puedan resolver debilidades.
- Sé recíproco con sus sentimientos. Deja lo que estés haciendo cuando tenga algún detalle o gesto de amor para ti y no olvides agradecerle cariñosamente.
- Muestra tu amor incondicional apoyándolo ante las dificultades o cuando esté enfermo.
- Dale las buenas noches siempre antes de dormir y un tierno beso en su mejilla o sobre su pequeña frente.