Elon Musk, el multimillonario tecnológico, volvió a dar de que hablar el pasado sábado al entregar un cheque de un millón de dólares a un miembro del público durante un mitin en Harrisburg, Pensilvania, donde estuvo apoyando la campaña de Donald Trump. Por si pareciera poco con este particular regalo, Musk anunció que continuará ofreciendo ese premio a un votante al azar cada día hasta las elecciones presidenciales del próximo 5 de noviembre. La polémica medida ha levantado dudas sobre su legalidad dentro del sistema electoral de Estados Unidos.
Un sorteo millonario en favor de Trump
Para participar en esta dinámica que parece salida de un video de Mr.Beast, las personas deben haber firmado una petición del America PAC, vinculado a Musk, y ser votantes registrados. De acuerdo a los términos de la iniciativa, se otorgará el premio en Pittsburgh, pero con la noticia de que Musk planea extender la oferta a otros estados clave como Georgia, Nevada y Arizona. Sin embargo, algunos expertos han advertido que esto podría entrar en conflicto con la ley electoral estadounidense.
El profesor de ciencias políticas de la UCLA, Rick Hasen, ha sido uno de los primeros en señalar la posible ilegalidad de la iniciativa en su blog especializado en derecho electoral. El profesor citó el artículo 52 USC 10307 (c), que prohíbe ofrecer o aceptar pagos a cambio de registrarse para votar o emitir un voto, lo cual podría acarrear multas de hasta 10.000 dólares o incluso penas de prisión de cinco años.
Por su parte, el gobernador de Pensilvania, Josh Shapiro, expresó su preocupación sobre el plan en una entrevista en el programa Meet the Press. Si bien evitó calificar la acción de Musk, afirmó que la propuesta debería ser objeto de revisión por parte de las autoridades. Dejando abierta la puerta abierta para una posible intervención de las fuerzas del orden.
Hasen también señaló a NBC News que la exclusividad de la petición para votantes registrados podría ser uno de los factores que ha generado tanto interés. No obstante, advirtió que las autoridades federales podrían tomar medidas contra Musk, ya sea mediante un proceso judicial o una demanda civil. El Departamento de Justicia de Estados Unidos tendría la facultad de acusar al famosos filántropo por violación de la ley.