Una empresa que desarrolla ‘chips’ cerebrales anunció que uno de sus pacientes logró dirigir el asistente virtual Alexa de Amazon con su mente, ordenándole completar tareas como ver programas en streaming y controlar dispositivos. Se trata del desarrollador Synchron.
La compañía, que se dedica a lo que se conoce como investigación de la interfaz cerebro-computadora, anunció esta semana que un implante en un vaso sanguíneo en la superficie del cerebro del hombre de 64 años le permitió “tocar” mentalmente íconos en una tableta Fire de Amazon.
¿Qué logró hacer el paciente con la mente gracias al trasplante cerebral?
Según la empresa con sede en Nueva York, el paciente, que padece esclerosis lateral amiotrófica (ELA), pudo hacer videollamadas, reproducir música, ver programas en streaming, controlar dispositivos domésticos inteligentes como luces, comprar en línea y leer libros utilizando su mente para dirigir a Alexa.
“Ser capaz de manejar aspectos importantes de mi entorno y controlar el acceso al entretenimiento me devuelve la independencia que estoy perdiendo”, dijo en un comunicado el paciente, cuyo único nombre público es Mark.
La prueba pretendía mostrar cómo los usuarios del implante podrían usar solo su mente para controlar hogares inteligentes con dispositivos compatibles con Alexa, como cámaras, enchufes y termostatos, según Synchron.
“Mientras que muchos sistemas domésticos inteligentes se basan en la voz o el tacto, estamos enviando señales de control directamente desde el cerebro”, añadió el fundador y director ejecutivo de la firma, Tom Oxley, en el comunicado.
“Los pacientes pueden interactuar con los dispositivos de su casa sin necesitar las manos o la voz, usando sólo sus pensamientos”.
Este es uno de los nuevos casos de trasplantes cerebrales que buscan innovar en este tipo de tecnologías. Una de ellas, muy conocida por pertenecer al magnate Elon Musk, es Neuralink y busca trabajar en conectar cerebros con ordenadores. En enero, la empresa del dueño de X instaló un implante cerebral a un hombre paralizado tras un accidente de buceo. Musk, también propietario de Tesla, calificó el implante como un éxito y en julio, dijo que su empresa estaba “avanzando” hacia un segundo paciente de prueba a medida que mejoraba su tecnología.