Han pasado casi once años desde que la industria de la televisión ecuatoriana despertó con la noticia de que Mafer Vargas, actual alcaldesa de Simón Bolívar, se debatía entre la vida y la muerte.
Fue en el año 2013, que la también ex modelo fue víctima de un brutal ataque que desfiguró su rosto y que la hizo pasar por una cirugía donde recibió más de 350 puntos, para la reconstrucción de su cara y de la que sería su nueva vida.
Tras más de 10 años de aquel atentado, la alcaldesa no evade hablar del tema y contrario a ella, se abrió con sus seguidores de redes sociales para mostrar algunas de las marcas que le siguen recordando lo fuerte que ha sido.
Fue por medio de un post que busca dar reconocimiento a todo lo que las mujeres viven, que Mafer Vargas exhibió los puntos exactos donde recibió los ataques, acompañado de un profundo y extenso mensaje.
“Las cicatrices que llevamos como mujeres son testigos de nuestra fuerza y resiliencia. Cada marca cuenta una historia de superación, de batallas ganadas contra adversidades. No son señales de debilidad, sino de coraje y determinación. Cada cicatriz es un recordatorio de que hemos enfrentado desafíos y los hemos superado. Son la prueba de que somos capaces de sanar, de aprender y de crecer. No permitas que ninguna cicatriz, ya sea física o emocional, te haga sentir menos valiosa o bella”, son algunas de las líneas con que la autoridad compartió sus imágenes.
Asimismo, Mafer Vargas también extendió una invitación a su comunidad de Instagram, para no ocultar sus cicatrices, si no celebrarlas.
Historia de incidente
Mafer Vargas ha pasado por todo un proceso para llegar donde está hoy, la alcaldesa de Simón Bolívar sufrió un atentado donde cuatro mujeres destrozaron su rostro para que nunca más volviese a modelar. Fue en 2013, Mafer se encontraba en un parqueadero de Guayaquil, una botella rota fue el instrumento que cambió el curso de su vida.