Según la revista estadounidense Rolling Stone y otros especialistas en la materia, la mejor banda de rock en el Reino Unido de todos los tiempos es Queen, gracias a la majestuosa carrera artística y premios obtenidos de la mano del gran Freddie Mercury. Sin embargo, una de las particularidades más resaltante de la banda es que no solo fue una persona la responsable de su éxito, ya que cada uno de sus integrantes colocaron su granito de arena para hacer posible tan enorme reconocimiento.
Es así el caso del guitarrista y uno de los fundadores de la agrupación Brian May, personalidad de la música que además de ser un virtuoso con el instrumento eléctrico de seis cuerdas, es también un reconocido activista con una mente prodigiosa que lo hizo merecedor de las licenciaturas en Física, Astronomía y un doctorado en Astrofísica.
Nueva distinción
A sus 75 años se le suma otra distinción a Brian May, sin embargo, no es una cualquiera tratándose de donde proviene. Este martes 14 de marzo el legendario guitarrista de Queen, fue nombrado caballero por el Rey Carlos III de Inglaterra en una ceremonia celebrada en el Palacio de Buckingham.
“Considero el título de caballero no tanto como una recompensa, sino más bien como un encargo para que siga luchando por la justicia. Para ser la voz de los que no tienen. Me esforzaré por ser digno, por ser ese caballero de brillante armadura. Sin palabras”, comentó una vez terminado el evento monárquico mediante una publicación en la red social, Instagram.
La cuenta oficial de Queen también expresó su emoción ante la enorme distinción, considerada por la mayoría de la sociedad británica como la más valiosa posible adquirida en su país. “La investidura de Brian como Caballero del Reino tuvo lugar hoy en el Palacio de Buckingham. El título de caballero le fue entregado a Brian por Su Alteza Real, el Rey Carlos. ¡Muchas felicidades, Sir Brian!”.
El último contacto entre Brian May la monarquía británica se dio en los festejos del Jubileo de Oro en 2002, por los 50 años del reinado de Isabel II, cuando tocó el himno nacional de Inglaterra desde la terraza del palacio de Buckingham. La distinción es el máximo título otorgado por la Excelentísima Orden del Imperio Británico y se concede a aquellos que no forman parte de la monarquía, logrando un estatus mayor.