La noche de este domingo reunió a los actores más famosos de Hollywood en la premiación de Los Oscar 2023, donde se hizo historia.
PUBLICIDAD
Actores como Jamie Lee Curtis, Nicole Kidman, Salma Hayek, y Brendan Fraser se dieron cita en la gala en la que Todo En Todas Partes Al Mismo Tiempo, fue la gran ganadora.
Sin embargo, Brendan Fraser fue el más aplaudido de la noche al ganar el premio a Mejor Actor por su papel de Charlie en la película The Whale.
Te recomendamos: La tierna reacción de los hijos de Brendan Fraser al ganar su primer Oscar: ¡lo mejor de la noche!
Pero, además de su Oscar, la película también ganó un premio por Mejor peinado y maquillaje, y es que la transformación del actor para la película fue sorprendente.
Fotos y videos de la impactante transformación de Brendan Fraser para The Whale
Para la película The Whale, Brendan Fraser tuvo que pasar más de 4 horas cada día para transformarse en Charlie, un profesor de inglés que debe lidiar con sus problemas de obesidad.
Los diseñadores de maquillaje y prostéticos, Adrien Morot, Judy Chin y Anne Marie Bradley utilizaron impresión en 3D para lograr crear una piel artificial de cuerpo completo, con perlas de agua gelatinosa para darle autenticidad al actor y se convirtiera en un hombre que pesaba 270 kilos.
PUBLICIDAD
“Teníamos dos piezas faciales, una por delante y otra por detrás, que llegaban hasta la parte superior del pecho. Luego, la mayoría de los días, tenía brazos que iban desde la punta de los dedos hasta el hombro y que se solapaban con la pieza del pecho”, explicó Morot a EW.
Te recomendamos: El oscuro momento de los Oscars 2023: Lady Gaga ayudó a fotógrafo, pero recibió terrible reacción
Además detalló: “así que tenía eso a ambos lados, y también tenía piernas que le llegaban hasta la cintura, así, y luego tenía una sección media aquí”.
Sin duda fue un trabajo muy complicado y digno de admiración, por lo que se tenían el Oscar bien merecido, además de la gran actuación de Brendan, que le ha valido ovaciones de más de 5 minutos.
The Whale representa el gran regreso de Brendan Fraser al cine, luego de vivir diferentes problemas y hasta depresión, y sin duda lo hizo por la puerta grande, al llevarse su primer Oscar.